El tema del que todo mundo habla actualmente pero del que también surgen muchas dudas es la vacuna contra la covid-19. A pesar de que desde 1796 el tema de la vacunación es de suma importancia para la salud, antes la información no estaba al alcance de todos, como ahora. 

Las vacunas son centros de entrenamiento para el sistema inmune, que lo preparan para responder ante una infección. Están conformadas por antígenos o componentes de un patógeno que no causan enfermedad, pero que al administrarse en el organismo provocan una respuesta del sistema inmune que puede combatir a los microorganismos en caso de que entren al cuerpo.

Existen cuatro maneras de desarrollar vacunas contra el SARS-CoV-2, virus causante de la covid-19:

• Virus
• Ácidos nucleicos (ARN)
• Vector viral 
• Basadas en proteínas

Funcionamiento de la vacuna ARN

Las primeras vacunas aprobadas contra la covid-19 son del tipo ARN. Éstas son creadas a partir del código genético del virus, el cual es modificado para que no sea una amenaza para el cuerpo y luego se "envuelve" en una cápsula de nanopartículas para evitar que se degrade.

Cuando inyectan la vacuna en una persona, este ARN llega a las células y son producidas miles de réplicas, con lo que el sistema inmune produce los anticuerpos y células necesarias para combatir el virus, en caso de que entre al organismo.

Los efectos secundarios más frecuentes que una persona puede experimentar son: dolor, fiebre, fatiga, escalofríos e hinchazón localizada en la zona de aplicación. Estas reacciones significan que la vacuna trabaja para enseñarle al cuerpo cómo luchar contra el virus. Para la mayoría de las personas, estos efectos no durarán más de 3 días.

Después de la aplicación de la vacuna, es importante continuar con el uso de cubrebocas y mantener el distanciamiento social y la higiene de manos como pilares fundamentales de la salud pública.

Con información de Axa Keralty

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