Como cada 2 de abril, hoy se conmemora el Día Mundial de Conciencia sobre el Autismo, una jornada de sensibilización sobre este trastorno, que busca reconocer los derechos de las personas que viven con esta condición y crear conciencia sobre la misma.
El término correcto es trastornos del espectro autista (TEA), que hace referencia a un padecimiento de origen neurológico que se manifiesta como una alteración que afecta, entre otras cosas, la manera de comunicarse y relacionarse con el entorno.
Los personas con autismo tienen dificultades al interactuar con otros, así como problemas de aprendizaje, debido a que suelen distraerse muy fácilmente y no prestan la atención debida a lo que ocurre a su alrededor.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que una de cada 160 personas tiene un trastorno autista, es decir, está presente en aproximadamente el 1% de la población mundial.
Este año, la conmemoración de esta fecha ha dado un nuevo giro, pues con la situación ocasionada por la presencia del COVID-19 en diferentes partes del mundo, las personas con autismo, en especial los niños, pueden no entender por completo la magnitud del problema a través de las fuentes de información convencionales, y podrían no entender por qué deben cambiar sus rutinas y permanecer de tiempo completo en casa.
Por esta razón, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha creado pictogramas que pueden usar los adultos para explicarle a los niños qué es el coronavirus, por qué han cambiado las cosas a su alrededor, así como la razón por la cual han cambiado sus rutinas diarias o sus salidas a la calle son tan limitadas.
Esta herramienta es de gran utilidad, ya que generalmente las personas con autismo comprenden y aprenden mejor de manera visual, por lo que estos dibujos pueden ayudarles a entender de mejor forma la situación que viven actualmente.
La siguiente ilustración, creada por la organización Mind Heart, explica de manera sencilla qué es el coronavirus, cómo deben lavarse las manos para prevenir el contagio y la razón por la que es necesario e importante no salir de casa o hacerlo lo menos posible.
Aunque hay personas con autismo que se sienten bien al quedarse en casa, pues para ellos es un espacio cómodo y seguro, para otros el encierro y el cambio en las rutinas pueden ser causas de estrés o ansiedad, al romper la rutina y la estabilidad a la que estaban acostumbrados y que los hacía sentir seguros y en equilibrio.
Por ello, algunas personas con autismo necesitan salir aunque sea un poco, caminar por la calle y ver los lugares que les son familiares. Así que es importante mostrar empatía ante esos casos, no juzgar ni criticar, pues para muchas personas con autismo, salir a la calle es básicamente una cuestión de salud.
Si en tu casa hay una persona con autismo y es necesario que salga para su bienestar, sólo tomen las debidas precauciones al mantener una distancia mínima de 1 metro respecto a las demás personas, evitar el contacto con superficies al estar en el exterior, usar gel antibacterial para desinfectar sus manos al estar afuera y lavarlas muy bien al llegar a casa.