Si vives solo, volver a casa de tus padres durante el aislamiento causado por la pandemia posiblemente no fue una decisión difícil de tomar. Aunque si has pasado largo tiempo sin visitarlos, ya sea porque vives en otra ciudad o porque el trabajo no te lo ha permitido, tal vez te sientas un poco extraño.
Recorrer tu habitación de la infancia, volver a ver esos pósters viejos de bandas que te gustaban, tener más espacio que en tu departamento y hasta esos olores a la comida casera de mamá que ya no recordabas, son como un pequeño vuelco al corazón.
Las personas han crecido con la idea de que tener éxito es estudiar una carrera, independizarte, trabajar, casarte, tener hijos y fabricar tu propia vida. Es por eso que volver a casa de tus padres hará que sientas que retrocedes generacionalmente. Es como si algo en la escala evolutiva te obligara a detenerte y no continuar con tu “plan de vida”.
Y es verdad, el impacto de vivir nuevamente con tus padres (cuando eres alguien que ya no necesita de ellos para nada) puede afectarte de muchas maneras, tanto positivas como negativas. Todo depende de cómo decidas que tu estancia con ellos se refleje en tus hábitos y tu rutina.
Si permites que tus padres hagan todo por ti (te laven la ropa, los trastes, te hagan la comida y, en pocas palabras, no pones límites) es obvio que te costará mucho más trabajo irte de su casa una vez que termine la cuarentena, y si lo haces, seguramente podrías caer en una especie de depresión porque en tu hogar no hay quien haga todo por ti.
Una forma positiva en la que puede impactarte pasar la cuarentena en casa de tus padres es que puede servirte para recapitular, abrir tu mente y cuestionarte si lo que haces ahora es lo que querías hacer cuando eras niño, y si ese tan inamovible plan de vida que tienes ahora realmente es lo que te hace feliz.
Toma este tiempo para reconectar con lo verdaderamente valioso, que eres tú mismo y tus raíces. Pon límites para ser lo suficientemente independiente y no te sientas culpable de volver al nido, tal vez tu subconsciente lo pidió para poder ayudar a tus padres o para no sentirte solo. Si eres de esas personas que temen ir de vacaciones con su familia, quizá ahora lo veas de manera diferente; quizá se refuerce tu idea y descubras por qué no quieres estar ahí, o encuentres razones para querer volver cada verano o Navidad.
La psicóloga Rumana Mansur dice lo siguiente:
Esta generación experimenta un punto muerto y un nuevo comienzo, a diferencia de cualquier otra generación. En esta pandemia pueden aprender a no dar su vida por sentado. Ahora pueden perseguir su futuro con intenciones, buena voluntad y un sentido de autoconservación. Pueden aprender nuevas formas de sobrevivir, hacer frente y ser creativos para navegar en la vida.
Simplemente aprovecha este tiempo para aprender sobre ti mismo y sobre la vida que llevas actualmente.