En abril de este año se llevó a cabo la 4ª Cumbre Global del Yoghurt en San Diego, California. En ella se plantearon diversas perspectivas sobre los beneficios del yoghurt en la salud. Como parte de estos temas, surgió una cuestión sumamente interesante, ¿cuál es la relación entre los lácteos, la glucosa y la insulina? Te cuento un poco.
El Dr. Thomas Wolever abordó este tema. De acuerdo con sus estudios, descubrió que las dietas con bajo índice glucémico (IG) o baja carga glucémica (CG) favorecen la reducción del riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Una parte importante para esta investigación se ha centrado en el yoghurt –el cual tiene un IG bajo debido a la combinación de su contenido de lactosa y proteínas–, por lo que si se consume solo o como parte de un desayuno o comida, favorece una respuesta de glucosa e insulina más baja que otras colaciones o comidas no saludables, las cuales, por el contrario, pueden incrementar los niveles de glucosa e insulina. Por lo tanto, la elección de yoghurt, como parte de un estilo de vida con una alimentación saludable, puede contribuir a disminuir el IG y el CG de la dieta y, por lo tanto, disminuye el riesgo de contraer diabetes tipo 2. Personalmente, te recomendaría integrar en tu alimentación diaria el consumo de granos integrales (con moderación): incluir más frutas y verduras de bajo índice glucémico como: fresas, moras, zarzamora, frambuesa, kiwi, durazno, mandarina, ciruela, nectarina, toronja, tunas, jitomate, pepino, pimiento morrón, calabacitas, brócoli, coliflor, champiñones, espinacas, acelgas, entre otras.
De igual forma, el Dr. Angelo Tremblay propuso que la promoción del consumo de yoghurt puede ser una buena y efectiva estrategia a nivel global para la prevención de la diabetes. Durante su presentación, mostró que el consumo de yoghurt puede ser la “firma de una dieta y un estilo de vida saludables”.
El consumo de yoghurt de manera frecuente se relaciona con un estilo de vida de saludable, un mejor consumo de nutrimentos y una dieta de mejor calidad en comparación con las personas que no consumen yoghurt o consumen muy poco. Además, ahora también sabemos que el consumo de yoghurt y los patrones de dieta saludable están asociados con un menor riesgo de presentar diabetes tipo 2. También te recomiendo la inclusión alimentos que son benéficos por sus ingredientes funcionales como los pescados azules, de aguas frías y profundas, ricos en Omega 3 de cadena larga (EPA y DHA): salmón, trucha, sardinas, atún fresco; la chía, las leguminosas como las lentejas y los garbanzos que son ricas en fibra soluble y también el aceite de oliva que es un tipo de grasa cardiosaludable rica en antioxidantes, vitamina E, carotenos y polifenoles, por nombrar algunos ejemplos. (Puedes conocer detalles aquí).