Llegó ese momento del año. La época de dar y compartir… virus. Sí, justo cuando pensabas que en el trabajo estarías a salvo, Juan de contabilidad decide que no va a gastar sus días de baja por enfermedad y procede a estornudar en tu croissant. ¿Desconsiderado? Bastante. Pero no todo está perdido. Hay cosas que puedes hacer para protegerte de la gripe que ronda la oficina:
Lávate las manos
Ya sea que te sientas un poco bajo de energía o que empieces a notar que el ambiente en tu lugar de trabajo viene acompañado de una orquesta de estornudos y tosidos, por favor, ¡lávate bien las manos! También, evita tocarte la cara y entrar en contacto innecesario con tus colegas. Sin exagerar, claro. No hace falta que llegues enfundado en un traje apto para evitar la cuarentena. Si ya estás enfermo, sé considerado con los demás, estornuda en tu pañuelo (no en tu mano) y desinfecta las superficies regularmente.
Duerme suficiente
Un estudio señala que dormir bien es una de las medidas más importantes que puedes tomar para protegerte durante esta temporada de gripe. Si duermes menos de 6 horas cada noche, eres cuatro veces más propenso a resfriarte. Tu objetivo debe ser dormir mínimo 7 horas. Aprovecha que mientras la temperatura baja y el Sol se pone más temprano, puedes irte a la cama antes para sentirte renovado cada mañana.
Relájate
No se puede negar que existe una gran conexión entre el cuerpo y la mente. El impacto del estrés en el sistema inmune es poderoso. Las personas que se estresan constantemente están más expuestas a contraer el virus de la gripe. A mayor producción de cortisol, mayor respuesta inflamatoria del cuerpo ante un virus. Si te sientes muy presionado por la razón que sea, intenta con la práctica de meditación y yoga.
Haz ejercicio
Puede que sea lo último en lo que pienses cuando te sientes un foco de infección andante, pero mantenerte activo puede ser la clave para aliviar ese molesto resfriado. El ejercicio regular de intensidad moderada mejora tu sistema inmune y te ayuda a deshacerte del virus más rápidamente. Puede ser andar en bici, caminar, nadar o hacer yoga. Con 30 minutos al día es suficiente, y tus compañeros de oficina te lo agradecerán.
Mantente hidratado
Beber suficiente agua es recomendable para prácticamente cualquier escenario. Resulta que en este caso también, pues los fluidos ayudan a limpiar el cuerpo de infecciones. Escucha tu cuerpo; si tu orina está muy amarilla o tienes la boca seca es evidente que necesitas agua.
Toma caldo de verduras
La mayoría de los resfriados son causados por la respuesta inflamatoria del cuerpo que produce glóbulos blancos llamados neutrófilos, mismos que incrementan la producción de mucosa. El consumo de un buen caldo de verduras natural es capaz de inhibir el movimiento de los neutrófilos; es decir, tiene un efecto antiinflamatorio. Aunque no estés enfermo, te conviene elegir este platillo para comer en la oficina.
Con información de Greatist