Al número de veces que el corazón se contrae durante 1 minuto (latidos por minuto) se le conoce como frecuencia cardiaca. A quienes hacen ejercicio es más probable que este término les parezca familiar porque a menudo sirve monitorear la frecuencia cardiaca, debido a que en determinado rango se ocupa mayor grasa como energía, pero pocas veces se considera medirla en reposo.   

"Monitorear la frecuencia cardiaca en reposo es importante porque puede ayudar a proporcionar pistas sobre la salud general de tu corazón", explica la doctora Bindu Chebrolu, cardióloga del Hospital Houston Methodist. Por ejemplo, una frecuencia cardiaca en reposo constantemente alta "puede ser una señal de que tu corazón no funciona tan eficientemente como debería. En algunos casos, incluso puede ser un signo de una afección cardiaca subyacente".

Para el correcto funcionamiento del organismo es necesario que el corazón bombee la sangre hacia todos los órganos, pero además lo debe hacer a una determinada presión (presión arterial) y a una determinada frecuencia. Para este proceso, en cada latido hay un alto consumo de energía.

¿Qué es la frecuencia cardiaca en reposo?

Tu corazón nunca deja de latir; entonces, tu frecuencia cardiaca en reposo es la cantidad de veces que tu corazón late en 1 minuto mientras estás en reposo. "Es normal que tu frecuencia cardiaca en reposo difiera de la de otra persona, y también es normal que tu propia frecuencia cardiaca varíe ligeramente a lo largo del día", explica Chebrolu.

Los factores que pueden afectar tu frecuencia cardiaca en reposo incluyen:

• Edad
• Nivel de ejercicio
• Actividad (sentado o de pie)
• Tener una enfermedad cardiaca, diabetes o colesterol alto
• Medicamentos
• Fumar
• Las emociones que experimentas
• Las condiciones externas, incluida la temperatura del aire

"Sin embargo, en términos generales, una frecuencia cardiaca en reposo normal suele oscilar entre 60 y 100 latidos por minuto en adultos", señala la especialista.

Calcula tu frecuencia cardiaca en reposo

Hacerlo es tan fácil como revisar tu pulso:

1. Ubícala en el costado de tu cuello (al lado de la tráquea) o en la parte inferior de la muñeca (más cerca, del mismo lado que el pulgar).
2. Mientras estás sentado, y una vez que sientas tu pulso, cuenta el número de latidos que sientes en un lapso de 30 segundos con cronómetro en mano.
3. Multiplica este número por 2 para calcular los latidos de tu corazón por minuto.

"Para obtener una representación precisa de tu frecuencia cardiaca en reposo, repite este proceso varias veces y durante varios días", agrega Chebrolu. Existen varios monitores de actividad física, oxímetros e incluso relojes inteligentes que proporcionan información sobre la frecuencia cardiaca, y dado que estos dispositivos recopilan mediciones a lo largo del día, son una forma sencilla de monitorear con mayor precisión tu frecuencia cardiaca promedio en reposo.

"Las mediciones de frecuencia cardiaca tomadas por dispositivos portátiles pueden no ser tan confiables como medir el pulso a mano, pero pueden ayudarte a rastrear tendencias generales y detectar cambios en la frecuencia cardiaca en reposo", concluye la doctora.

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