La fertilidad es un tema complicado y al mismo tiempo cargado de muchas emociones. La naturaleza del tema hace que alrededor de él aparezcan diversos mitos que han sobrevivido por décadas y se esparcen de generación en generación.
Algunas parejan anhelan tanto tener un bebé que harían cualquier cosa para lograrlo, desde seguir los consejos de familiares y amigos hasta navegar horas en internet entre información falsa e incompleta.
Expertos en fertilidad ayudan a aclarar la información que circula en internet, los mitos más comunes que quieren que las personas dejen de creer lo antes posible y, en cambio, se acerquen con un especialista.
Bat-Sheva Lerner Maslow, endocrinóloga reproductiva en Extend Fertility, se encuentra con mucha información errónea sobre el control de la natalidad y su impacto potencial en la fertilidad. "Algunas mujeres sienten que el control de la natalidad debe proteger su fertilidad al 'salvar' sus óvulos de la ovulación". La experta comenta que a otras les preocupa que las píldoras dañen su fertilidad, especialmente si las toman durante mucho tiempo.
En realidad, ninguna de las dos cosas es cierta. "Una vez que una mujer deja de tomar píldoras anticonceptivas, la probabilidad de que quede embarazada no cambia, como si nunca hubiera tomado las píldoras".
Esta es otra creencia común. "Muchas mujeres temen que sean infértiles si experimentan períodos irregulares", dice Lerner. Pero el ciclo irregular ocasional es muy común. "Las interrupciones en el sueño, la rutina de ejercicios y los niveles de estrés pueden alterar el delicado equilibrio de las hormonas que regulan el ciclo menstrual".
Los ciclos irregulares no explican la infertilidad, aunque pueden hacer que tratar de concebir sea un desafío. La ventana de concepción máxima es la ovulación, que dura alrededor de 14 días antes de que comience el siguiente período. Si tu ciclo es irregular, puede ser complicado cronometrar correctamente el momento en que puedes quedar embarazada. "Si este es tu caso, vale la pena hablar con tu ginecólogo lo antes posible, especialmente si son más de 3 o 4 meses sin un período", dice la doctora Lerner.
Según Brian Levine, socio fundador y director de la clínica de fertilidad CCRM-Nueva York, no necesitas tener relaciones sexuales todos los días para quedar embarazada (aunque claro, nada te limita para darle rienda suelta a tu deseo). "La ventana fértil es de aproximadamente 14 días después de que una mujer comienza su ciclo menstrual", aunque esto varía un poco según el ciclo de cada mujer. "Por lo tanto, los 2 días antes y 2 días después son ideales para intentar". Fuera de esa ventana de ovulación, es probable que el sexo no conduzca a un embarazo.
Si bien la fertilidad disminuye naturalmente después de los 35 años, "las clínicas de fertilidad no funcionarían si no pudieran embarazar a las pacientes mayores de 40 años", dice el doctor Levine. Según la Sociedad Estadounidense de Medicina Reproductiva, el límite de edad recomendado para el embarazo en mujeres en edad reproductiva es de 55 años. "Esto significa que las mujeres menores de 55 años [que no han pasado por la menopausia] son candidatas viables para quedar embarazadas". Sin embargo, Levine señala que para muchas personas mayores de 40 años, las tasas de éxito más altas son con óvulos de donantes.
Así como es un mito que quedar embarazada después de los 40 años es imposible, el doctor Levine dice que muchos otros creen que es fácil, lo cual tampoco es el caso. "Muy a menudo se requieren tecnologías reproductivas avanzadas como medicamentos para la fertilidad, inseminaciones intrauterinas (IUI), fertilización in vitro (FIV) o posible donación de ovocitos", explica el especialista. "El útero es un órgano que no envejece como los ovarios y, como tal, puede funcionar bien a mediados de los 50".
Se habla mucho de la edad de la mujer cuando se trata de fertilidad, pero Levine comenta que la edad de quien proporciona el esperma también es importante. "A medida que los hombres envejecen, los parámetros espermáticos pueden empeorar. Por lo tanto, los espermatozoides más viejos se pueden asociar con infertilidad y se pueden asociar con resultados disminuidos de FIV", dice Mark Trolice, director de Fertility CARE y autor de The Fertility Doctor's Guide to Overcoming Infertility. Agrega que la edad de un hombre también juega un papel en el riesgo de aborto espontáneo: "Los hombres que tienen más de 39 años han mostrado tasas crecientes de pérdida del embarazo, así como defectos de nacimiento, infertilidad, autismo y esquizofrenia".
"Lo escucho mucho de nuestros pacientes, muchos de los cuales no tienen una pareja o tienen una pareja con la que no están dispuestos a comprometerse de esa manera", comparte la doctora Maslow. "En el pasado, la tecnología de congelación de óvulos no era tan buena y los embriones se consideraban "más resistentes". En un laboratorio de alta calidad, los óvulos congelados deberían ser tan resistentes como los embriones".
Maslow hace énfasis en que congelar embriones es un compromiso más arriesgado, incluso más que un óvulo. "Una vez que congelas los embriones con tu pareja, ambos son 'padres' de esos embriones por igual", señala. "Si algo le sucediera a la relación, la salud de una de las partes, o simplemente alguno cambia de opinión, es probable que esos embriones no puedan ser utilizados".
En ese sentido, mientras que la congelación de óvulos y la FIV son increíbles desarrollos en la ciencia reproductiva, Nataki Douglas, presidenta de la Junta Asesora Médica de Modern Fertility, no está convencida de que sean opciones de respaldo "consistentes y confiables" para la planificación familiar. "La FIV no puede garantizar un bebé". La especialista señala la gran cantidad de variabilidad que conlleva la fertilidad, como el recuento y la calidad del óvulo, y la salud del útero.
Según los Centros de Control de Enfermedades y Prevención, la tasa de éxito de las tecnologías de reproducción asistida (TRA) como la FIV es bastante baja: sólo el 31% de los ciclos de TRA condujo a nacimientos vivos y saludables en mujeres menores de 35 años, el 24% en mujeres de 35 a 37 años, y sólo el 16% en mujeres de 37 a 40 años. Suelen destacar los éxitos, pero no los fracasos. "Muchas veces, las mujeres requieren más de un ciclo de tratamiento para concebir, lo cual es costoso y es una inversión emocional significativa".
El hecho de que un familiar cercano tuviera un aborto espontáneo no significa que tú también estés destinada a tener uno. "Las causas genéticas de aborto espontáneo comprenden sólo el 5% de los factores que contribuyen", dice Trolice. Sin embargo, agrega que si tú o tus padres son portadores de una anomalía cromosómica llamada translocación equilibrada (donde tus cromosomas están presentes, pero están mezclados o en la ubicación incorrecta), esto aumentará el riesgo de pérdida del embarazo. Esto se puede diagnosticar mediante pruebas genéticas.
Según el doctor Trolice, si experimentas sangrado en tu primer trimestre, se une al 15-25% de las mujeres que también pasan por esto. "Si bien cualquier sangrado es alarmante, no siempre se asocia con un aborto espontáneo". El especialista explica que el sangrado abundante provoca un aborto espontáneo sólo el 25% de las veces; sin embargo, es esencial que las personas hablen con un obstetra/ginecólogo si notan sangrado en cualquier etapa del embarazo para evaluar lo que sucede.
Hay mucha información sobre la fertilidad, pero la que va de boca en boca y la que circula en internet y las redes sociales no siempre es adecuada. Es por eso que es muy importante acercarse con expertos en la materia si tienes problemas de fertilidad, pues ellos harán las recomendaciones y brindarán el tratamiento necesario para tu caso.
Con información de Well + Good