Para encontrar el equilibrio en nuestras vidas es necesario avanzar poco a poco, comprendiendo que se trata de un proceso. No todos los días serán iguales o mejores que el anterior, pero cuando volvamos a sentirnos fuera de nuestro equilibrio debemos percatarnos de qué fue lo que nos sacó de balance, y esto nos aportará mucho conocimiento para sobrellevar la siguiente crisis y lograr que cada vez sea menos intensa o prolongada.
Además de entender que la búsqueda del equilibrio es paulatina debemos comprender que el balance implica todas y cada una de las partes de nuestra vida, empezando por las que están en nuestro cuerpo. Aquí te contamos cómo cada parte del cuerpo puede coordinarse en armonía.
Mente
Vinculamos a la mente con los pensamientos y nuestras ideologías. Para estar en sintonía contigo mismo es importante que aprendas a definir lo que te gusta y lo que no, de acuerdo con tu propio sistema de creencias. Para ello sólo necesitas detenerte a reconocer las situaciones en las que te sientes cómodo y en las que no.
Boca y garganta
Cuando definas tu propia ideología, debes aprender a expresarla. Por eso con la boca y la garganta se asocia nuestra capacidad para ser claros y concisos con nuestras ideas, deseos y malestares.
Corazón
Además de clarificar y saber expresar nuestras ideas debemos tener en cuenta nuestras emociones, eso que queremos recordar con el corazón. No todo es raciocinio. Los sentimientos también son valiosos; sólo hay que aprender a comprenderlos y respetarlos.
Sistema digestivo
En el sistema digestivo (también conocido como intestino) se encuentra la microbiota intestinal. En ella ocurren múltiples procesos que son importantes para la salud del cuerpo y el bienestar integral. Por ejemplo, una alimentación saludable y variada fomenta la armonía con nuestro cuerpo, pues nos hace sentir más cómodos y dispuestos a trabajar en la búsqueda del equilibrio. Para ello te recomendamos mantener una alimentación saludable que incluya el consumo de yoghurt con probióticos.
Órganos sexuales
Estar conscientes de nuestra sexualidad también favorece el balance. Cada quien tiene derecho a preferir lo que más disfruta y a respetar sus propios deseos. Lo importante es actuar con conciencia y respeto hacia los demás y hacia uno mismo.
Piernas y pies
Las piernas y pies se relacionan con el arraigo. Esta parte es sumamente importante para encontrar el equilibrio dentro de uno mismo. El arraigo es nuestra raíz y fundamento. Ya sea nuestra familia, cultura, nacionalidad o cualquier otro aspecto que nos ayude a definirnos y crecer, aceptar y querer todo lo que forma parte de nuestro ser más profundo produce una sensación de identidad imprescindible en la sintonía con nosotros mismos.
Ahora que conoces todas las partes que colaboran en la búsqueda del equilibrio interno, puedes trabajar con cada una de ellas de la manera en que a ti te funcione mejor. Recuerda procurar cada aspecto de tu vida para que, poco a poco, te sientas en verdadera sintonía contigo.