Nuestros hogares representan la figura de la zona de confort y limpieza por excelencia. La casa es el lugar donde más tiempo pasamos: comemos, dormimos, descansamos, disfrutamos del ocio. Aparentemente, es mucho más segura que la calle en cuanto a higiene: pensamos que en el interior la calidad del aire es mejor porque evitamos, por ejemplo, el humo de los automóviles y camiones, la polución en general y los virus... Después de todo, cuando hay alguna emergencia por epidemia se nos pide permanecer en casa, pero en realidad esto no es del todo cierto.

Piensa por un instante todo lo que se concentra en un espacio cerrado: personas, animales, electrodomésticos; contaminantes microbianos, la caspa de los animales, moho, cochambre, ozono que puede combinarse con sustancias químicas del hogar. Algunas estimaciones dicen que el aire en el hogar tiene una calidad 10 veces peor que en el exterior. Utilizamos demasiados perfumes, productos químicos de limpieza, desodorantes, sustancias abrasivas y pinturas, que contaminan el aire, aire que regularmente no circula y se queda estancado. Podemos mejorar la calidad del aire entre las paredes de nuestro hogar con estos cinco pasos:

1.Deja los zapatos en la entrada.

Las suelas de los zapatos transportan cualquier cantidad de contaminantes: pintura, pesticidas, plomo, bacterias, otros contaminantes que hay en el suelo de los lugares por donde hemos caminado. Es mejor no introducirlos al ambiente de nuestra casa. 

2. Evita usar aerosoles en el interior del hogar

Desodorantes, pintura, cualquier sustancia en spray debe ser desterrada de la casa. Los compuestos orgánicos volátiles (COV) contienen una enorme cantidad de gases y compuestos dañinos para la salud.

3. Abre las ventanas

El aire debe circular de alguna forma, y la única posibilidad que tiene de hacerlo es por las ventanas. Al contrario de lo que pensamos, el aire contaminado no entra por las ventanas, recicla el que está en el interior de la casa y lo limpia. En el interior de las casa el aire está más contaminado que en el exterior.

4. Limpia con regularidad la casa

La limpieza es necesaria para mantener el aire limpio. No decimos que debemos volvernos obsesivos con la limpieza, pero hacerlo con regularidad nos garantizará un ambiente más sano y amable.

5. Plantas

Las  plantas generan oxígeno y limpian el ambiente, así que tener algunas que sean nativas de nuestra región geográfica en casa es buena idea. Si eres un jardinero primerizo, busca plantas especialmente resilientes, si no sabes por dónde empezar puedes adoptar un cactus. 

Si eres de las personas que pensaba que mantener cerrado tu hogar era mucho mejor que ventilarlo, te equivocas. ¡Vamos! Abre tus ventanas.

Con información de Mamavation