Comprar algo nuevo para tu casa es algo que te puede llenar de entusiasmo y emoción, pero no por eso debes hacer compras apresuradas y sin pensar, pues la planeación siempre es clave para que las cosas salgan bien.
Además de establecer el presupuesto que vas a destinar a la remodelación, redecoración y compra de muebles, es necesario que tomes en cuenta algunos aspectos antes de salir en busca de tus nuevos muebles.
Esto es algo básico para que no te lleves la sorpresa de que, al llegar a casa, ese mueble que te encantó, no cabe en la habitación donde lo quieres poner. Así que lo primero es conocer las medidas exactas que debe de tener y anotarlas todas, para que al llegar a la mueblería no resulte que se te han olvidado. Además, lleva tu metro para que te cerciores de que cada mueble que te guste tiene la medida justa.
Además de hacer una lista de lo que necesitas, con sus respectivas medidas, es importante que consideres cuánto dinero dispones para la compra de tus nuevos muebles, pues no querrás quedarte sin recámara o comedor porque todo se te fue sólo en la sala.
Así que haz cuentas, considera lo que tengas ahorrado para este fin, así como tus ingresos y egresos fijos por si vas a comprar a Meses sin Intereses. Para comprar a crédito ten en cuenta que el monto total que debes pagar mes con mes no debe ser mayor de entre el 20% y 30% de tu salario mensual, para que no te veas en aprietos financieros.
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Antes de comprar muebles en oferta o cosas sueltas aquí y allá, planifica y decide exactamente qué muebles necesitas y para qué vas a usarlos. Es importante que, además de bonitos, tus muebles sean útiles y funcionales, así como que mantengan un equilibrio con el resto de tu mobiliario y decoración.
Define el estilo que le quieres dar a tus espacios: minimalista, moderno, rústico, colorido, con colores neutros, etcétera. Y en la misma hoja donde anotaste las medidas puedes poner las opciones de colores y texturas que quieres para cada mueble.
Un par de parámetros para decidir esto son el tamaño y la iluminación de la habitación. Recuerda que los colores oscuros dan la sensación de un espacio reducido, mientras que los claros generan una de amplitud. Y si las paredes son blancas, puedes jugar con el color del mobiliario y los accesorios.
Seguro has escuchado eso de que menos es más y esta es una de las premisas del Feng shui, la filosofía oriental basada en el acomodo consciente y armónico de los espacios. Esto se refiere a que no te pongas a comprar todos los muebles que veas sólo porque te gustan o son baratos, sino que debes hacer una análisis de lo que realmente necesitas y lo que se verá bien en cada espacio, sin saturarlo.
En este sentido, tus muebles deben tener un propósito. Por eso debes pensar para qué vas a usarlos y elegir aquellos que mejor cumplan con esa función. Además, tus muebles deben ayudarte a mantener el orden en tu casa, por lo que aquellos con cajones amplios y puertas para guardar las cosas que no deben estar visibles son buenas alternativas.