Al hablar de felicidad es importante recordar que todas las personas somos una mezcla de emociones y experiencias que cambian todo el tiempo. Por eso, no se puede anhelar el bienestar integral si sólo se atiende a una parte de la totalidad de nuestro ser. Para lograrlo, creamos una serie de textos que han tratado la importancia del equilibrio del cuerpo y de la mente, y ahora nos centraremos en la evolución espiritual, para llegar a la felicidad de manera natural y real.

Parte III: evolución espiritual

La evolución espiritual se relaciona con la adquisición de conciencia sobre nosotros mismos y nuestra relación con el resto del mundo. Para elevar nuestro desarrollo espiritual, te recomendamos estos cinco hábitos.

(También puedes iniciar con ¿Sabes cuál es tu nivel de evolución espiritual?)

1. Sé compasivo

La compasión es un sentimiento libre de egoísmo. Se trata de una empatía real en la que el sufrimiento del otro pertenece a uno mismo, lugar desde el cual podemos ayudar con sinceridad. Sentir compasión beneficia la evolución espiritual pues requiere de mucha sabiduría y experiencia para vivirse. Además, la compasión permite trascender del ser dual por una ausencia de yo o un conocimiento no-dual. Característica de una mente despierta.

2. Conecta con el universo

No tengas pena ni miedo de reconocer y contactar con el universo. Ya sea que practiques alguna religión y te sientas cómodo rezando, que te guste observar las estrellas por la noche, o que medites para recordar tu participación en el mundo, trata de conectar con el universo para reconocer las poderosas sensaciones que ejerce en ti.

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3. Agradece

Puedes empezar por un hábito sencillo: por las noches, escribe tres momentos del día por los que estés agradecido. La gratitud modifica nuestra perspectiva y fomenta el desarrollo espiritual, pues nos hace más conscientes de todo lo bueno que ocurre a nuestro alrededor.

4. Perdona

Es normal molestarse por ciertos acontecimientos o actitudes, el problema está en guardar esos sentimientos por demasiado tiempo. El rencor absorbe demasiada energía y no permite la evolución del espíritu. Es mejor perdonar y dejar pasar, simplemente centra tu atención en el presente.

5. Ten paciencia

El camino a la evolución espiritual no siempre es estable ni va siempre hacia adelante. Hay días en que podemos sentirnos más conectados con nuestro ser espiritual que otros y eso es natural. Recuerda tener paciencia y seguir creyendo en ti. Poco a poco podrás adquirir mayor conciencia de tu ser.

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