Los humanos, especialmente las mujeres, han tenido durante mucho tiempo una profunda conexión con la Luna. Durante miles de años se ha organizado el tiempo y las tradiciones en la observación del movimiento lunar en el cielo nocturno.

A medida que la Tierra orbita el Sol, la Luna orbita la Tierra, y en el transcurso de unos 29 días tienen lugar las distintas fases lunares.

Mientras la Luna se toma su tiempo para reiniciar, renovar, irradiar, retroceder y descansar cada mes, tú también lo haces. Atraviesas diferentes experiencias emocionales, mentalidades y formas de ser. Viajas alrededor de esos sentimientos, de la misma manera en que la Luna viaja alrededor de la Tierra.

Cuanto más sintonizado estés con estas fases y con la forma en que su energía se alinea dentro de ti, mejor podrás aprovechar su magia.

Cada fase lunar tiene una diferencia de unos 7 días y aunque quizás hayas oído hablar mucho más acerca de la energía de la luna llena, en realidad hay energías únicas que se alinean con cada fase. Si eres nuevo en los rituales lunares, considera esto: cada una de las fases tiene un significado especial, y puedes seguir las mismas fases mental, espiritual e incluso físicamente.

Cuando se considera que cada una de estas fases tiene una asociación energética específica, existe la oportunidad de crear una nueva práctica ritual para ellas.

Un ritual es una práctica simbólica, observación o ejercicio diseñado para alinearse y honrar. El objetivo de un ritual lunar es específicamente alinearse con la energía de la Luna. La práctica de rituales de luna puede ayudarte a alinear tu experiencia, intenciones y manifestaciones con el poder iluminador de la Luna.

Para crear un ritual que resuene contigo, las prácticas que hagas deben elevar intuitivamente tu vibración interna. La intención de un ritual lunar es simplemente conectar contigo mismo, tus guías, tu ser interior, la naturaleza, o lo que sea que te ilumine. Puede ser una noche de celebración, gratitud, manifestación, descanso o liberación.

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4 prácticas esenciales para rituales lunares

Respiración

Para tu ritual, no necesitas tener una práctica regular de respiración, simplemente necesitas respirar conscientemente, con la intención de crear una sensación de relajación y calma. Respirar profundamente con el diafragma con exhalaciones largas y lentas es un buen punto de partida.

Un conteo de cuatro inhalaciones, una retención de cuatro y una exhalación de cuatro es un buen comienzo para calmar la respiración y entrar en el ritual.

Movimiento

¡Aquí es donde realmente puedes divertirte! El movimiento puede variar desde poses de yoga hasta movimientos de baile y todo lo que tu intuición te indique. La idea es llamar al espíritu de un animal (cualquier animal que te atraiga) dentro de tu cuerpo y luego moverte como el animal se mueve.

Visualización

La visualización es otra oportunidad para ser creativo. Puedes empezar con una simple práctica de meditación y visualizar cualquier acción en la que quieras trabajar para ese ciclo lunar en particular. Es decir, manifestar, limpiar, refinar, etcétera.

Fuego

En la práctica del uso del fuego, considera la dualidad de lo que el fuego ofrece: las cosas se queman y luego renacen, o de ellas surgen nuevas formas de crecimiento. Para realizar una simple práctica de fuego para soltar, coloca una vela y un pequeño tazón de agua. Escribe todo lo que tengas en tu mente en pequeños trozos de papel. Mientras escribes, quema el papel en la llama y apágalo en el agua. Visualiza que esas cosas desaparecen de tu mente mientras se queman.

Checa el siguiente video para conocer más sobre la energía de las fases lunares y la forma en que puedes aprocecharlas para lograr tus objetivos.

Foto de portada: Anna Asryan / Unsplash