Este mes, Saturno es el principal protagonista en los espectáculos astronómicos. El planeta de los anillos se encuentra en oposición, lo que significa que tendrá un aspecto más grande y brillante en el firmamento.
El mejor momento para ver a Saturno es justo la noche del 9 de julio, cuando se encontrará en el punto preciso de la oposición, es decir, respecto al observador terrestre, estará directamente opuesto al Sol en el cielo. Esto significa que el planeta anillado será especialmente brillante porque estará bañado por la luz solar y en su punto más cercano a la Tierra en todo el año.
Durante la oposición, Saturno sale por el este al atardecer y se pone por el oeste al amanecer. A medianoche puedes encontrarlo si miras hacia el sur. El planeta resplandecerá durante la noche como una estrella brillante de color crema, en la parte baja del cielo sudeste.
Así que si tienes un telescopio, es momento de sacarlo para disfrutar de este espectáculo, ya que el brillo de los anillos parecerá aumentar gracias a la dispersión de la luz solar por sus innumerables fragmentos de partículas de hielo. Y a simple vista los anillos no se verán, sólo lucirá como una estrella.
La lluvia de meteoros de las Delta Acuáridas llegará desde su constelación homónima, Acuario, del 28 al 30 de julio.
Durante las noches de estos días podrás disfrutar de esta lluvia anual de meteoros. Para poder verlos en su máximo esplendor, lo ideal es que te alejes de la contaminación lumínica que invade la ciudad. En un ambiente lo suficientemente oscuro podrás ver más de 20 estrellas fugaces por hora.
Aunque en el hemisferio norte será adecuadamente visible, este espectáculo celeste será mejor para los observadores del hemisferio sur, donde las estrellas podrán apreciarse del 12 de julio al 23 de agosto, con una amplia actividad máxima que coincide con las fechas para el norte: del 28 al 30 de julio.