Este martes 15 de noviembre, la Secretaría de Marina–Armada de México dio a conocer que Frida –la perrita rescatista que participó en las labores de rescate tras los sismos que ocurrieron en México en 2017– falleció, a causa de padecimientos propios de su edad. 

Frida se encontraba en las instalaciones del Subgrupo de Control Canino, en la Ciudad de México, lugar donde pasó sus últimos años de vida, tras su retiro como rescatista en junio de 2019. 

Símbolo de esperanza y unión

En 2017, Frida se convirtió en un símbolo de esperanza y solidaridad tras los sismos que ocurrieron los días 7 y 19 de septiembre en México, ya que formó parte de las labores de búsqueda y rescate.

Con su carisma y su inconfundible atuendo de rescatista (sus botas y sus gafas protectoras), logró ganarse el corazón de los mexicanos, por lo que se convirtió en el símbolo de la esperanza en esos momentos difíciles y logró avivar en los mexicanos tanto el sentimiento de unión como el deseo de ayudar. 

Además, su presencia le dio al país y al mundo un ejemplo y una muestra de que si la solidaridad y la ayuda pueden darse entre especies distintas, más aún deben existir entre la misma especie.

La historia de Frida

Frida fue una labrador de color miel, que nació el 12 de abril de 2009 y desde que era una cachorra comenzó su entrenamiento, en el que mostró cualidades de independencia, concentración, temperamento equilibrado, intrepidez, curiosidad, fácil habituación a diferentes ambientes, mucha disposición al juego, facilidad de aprendizaje, empatía hacia las personas y facilidad para la convivencia social. 

Debido a estas cualidades y las características específicas de su raza, como su gran resistencia física, finos oídos para distinguir órdenes entre gritos y ruidos, y una alta capacidad olfativa, se determinó que se le daría entrenamiento en la función zootécnica de Búsqueda y Rescate; y así llegó a convertirse en toda una rescatista de la Armada de México. 

Aunque el entrenamiento de búsqueda y rescate de un perro dura aproximadamente 12 meses, Frida mostró aptitudes muy destacadas, por lo que logró completar su programa de entrenamiento en un tiempo récord de ocho meses, tras lo cual, fue asignada a trabajos de búsqueda y rescate en estructuras colapsadas.

Durante el tiempo que se mantuvo activa, Frida participó en operaciones de rescate en los sismos de Haití de 2010, de Ecuador en 2016 y del 7 y 19 de septiembre de 2017 en México. Logró localizar a 12 personas con vida y más de 40 cuerpos entre los escombros. 

Frida se retiró de sus labores de búsqueda y rescate el 24 de junio del 2019, en el marco del “Día Internacional del Rescatista”, en una ceremonia donde entregó su equipo táctico y recibió un juguete, como símbolo del inicio de su nueva vida. 

A partir de entonces, estuvo a cargo del Sub Grupo Canino del Estado Mayor del Alto Mando, donde ayudó en el entrenamiento de los nuevos elementos caninos en la búsqueda técnica, como es el caso de los hermanos Ecko y Evil, dos jóvenes pastores belgas malinois que fueron compañeros de Frida en las labores de rescate en 2017 y que destacan por su vigor, agilidad e inteligencia.

En marzo de este año, la SEMAR informó que Frida estaba delicada de salud y aunque esa ocasión logró sobreponerse, esta vez, los padecimientos propios de su edad le ocasionaron la muerte, a sus 13 años y 7 meses de vida. 

El pasado 7 de octubre, se llevó a cabo la develación de una escultura en honor a Frida, en las instalaciones de la Secretaría de Marina, donde se rindió homenaje por su inigualable labor en las misiones que se le encomendaron.

La placa que acompaña la escultura dice lo siguiente: 

En homenaje a la extraordinaria labor que tuviste como integrante de nuestra noble institución. En gratitud al cariño y amor que continúas sembrando a nuestra Gran Familia Naval, en millones de mexicanas y mexicanos, y más allá de nuestras fronteras. Tu vida nos motiva a continuar dándolo todo para servir a México. ¡Gracias querida Frida!

Finalmente, la SEMAR dio a conocer que Frida será cremada y sus cenizas serán depositadas en una urna al pie de dicha escultura.

¡Gracias, Frida, por tu valentía, por tu incansable labor y por todas las enseñanzas que sin saber le dejas a todo el país!