Si sólo pudieras llevarte una cosa a una isla, lo mejor sería empacar un montón de resiliencia porque esta cualidad puede ayudarnos a superar retos, situaciones traumáticas y pérdidas; en resumen, potencia tu capacidad de ser feliz. Las personas resilientes son inspiradoras porque no sólo logran superar la adversidad sino que parecen florecer a pesar de ella. Afortunadamente todos podemos aprender de su comportamiento, para entender cómo cultivar la resiliencia en nuestra vida. Estas son algunas conductas que caracterizan a las personas resilientes: 

1. Tienen una visión clara

No se enfocan en los obstáculos sino en lo que hay más allá de ellos, logrando mantener una perspectiva amplia y clara en cada situación, de tal manera que pueden tomar mejores decisiones, aun frente a la adversidad.

2. Viven atentas al momento presente

No tienden a rumiar el pasado porque entienden que su verdadero poder está en el presente y lo que pueden hacer aquí y ahora, así que concentran su atención en lo que está pasando, evitando las distracciones. 

3. Trabajan duro

Una vez que saben lo que quieren trabajan duro en ello; con frecuencia no son conscientes del tiempo que invierten en cada proyecto pues están totalmente enfocados en cada tarea. Ellos comprenden que todo es un proceso y es necesario ir paso a paso con la mayor dedicación posible. 

4. Cultivan la gratitud

Ellos saben que muchas de las cosas positiva su vida existen gracias al trabajo de otras personas, así que agradecen con frecuencia por lo que tienen. La gratitud también es un ingrediente clave para lograr la felicidad. 

5. No se enganchan con el sufrimiento

No importa si se trata de la muerte de un ser querido, el rompimiento de una relación o una pérdida económica, las personas resilientes entienden que el dolor también pasará. Procuran entender la lección que cada momento trae y aunque puedan sentir el sufrimiento no se identifican excesivamente con él, de tal manera que les es más fácil dejar ir cuando llega el momento adecuado. 

6. Cultivan la paciencia

Las personas resilientes comprenden que es necesario tener paciencia, lo cual les permite controlar sus impulsos, así que aunque se puedan sentir frustrados o enojados, mientras están en ese estado no ejercen acciones que después puedan lamentar. 

Con información de Psychology Today