Hay una gran diferencia entre una existencia miserable y una plena. La diferencia radica en la actitud con la que enfrentas la vida. Es normal sentirse mal a veces, pero si te quejas con mucha frecuencia, hay un problema grave. Ten cuidado, porque esa negatividad no sólo te afecta a ti, sino a todos a tu alrededor. Heather Burdo, de Bolde, comparte las siguientes señales que te advierten que es momento de cambiar tu actitud.
¿Eres el tipo de persona que disfruta al hablar mal de los demás? Preocuparte por la vida de los otros y lo que implica, sólo alimenta tu energía negativa. ¿Cómo se supone que debes centrarte en lo positivo cuando el drama de los demás se roba tu energía? Pasa sin ver cuando se trate de la vida ajena, a menos de que los demás te pidan tu opinión y tengas algo que decir.
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A pesar de ser una persona confiada en tus actitudes y habilidades, no puedes sino sentir envidia por las de los demás. Si te comparas con otras personas, no puedes crecer como individuo ni construir la vida que quieres para ti. Además, los celos son evidentes y sólo harán que todos se alejen.
Olvídate de si otros tienen lo que tú deseas y concéntrate en lo que puedes hacer por ti. La confianza también se nota y es contagiosa, así que reafírmate en lo positivo que quieres mostrar.
Lo creas o no, tu lenguaje corporal dice mucho sobre ti. Obsérvate cuando hablas con alguien cara a cara y analiza cómo es tu comportamiento; es probable que no quieras hacer contacto visual o mantengas cruzados los brazos. Eso significa que no dejas que los demás se acerquen y les haces sentir incomodidad. Esa es una gran manera de poner lo negativo como una barrera.
Eres humano, por lo que es natural que a veces tus sentimientos te dominen. Sin embargo, si no eres capaz de calmarte y ser realista, te pondrás a la defensiva hasta con los detalles más insignificantes. No te aferres a la energía negativa, porque otras personas a tu alrededor se darán cuenta.
¿Cuántas veces has saboteado tus deseos? Eres tu peor enemigo cuando criticas tus objetivos por inalcanzables. Por supuesto, nunca logras las metas a las que quieres llegar porque renuncias a ellas antes. Primero debes confiar en tus posibilidades y empezar con pequeños objetivos a corto plazo, y una vez que tengas esa confianza podrás con más. Además, no habrá quien te apoye si ahuyentas a los otros con tu negatividad.
Muchas veces te acercas a lo negativo y lo haces parte de tu vida. No te involucres con alguien en redes sociales que publica todo el tiempo sus desacuerdos o frustraciones (y tampoco lo hagas tú). También evita las noticias desagradables, los chismes, las críticas y todo lo negativo, sobre todo si eres una persona que se deja afectar por la negatividad constante.
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Odiar tu trabajo hace que probablemente te lleves a casa algún drama relacionado al final de cada día. Tal vez asumes que todo el mundo odia su trabajo y es normal desahogarse, pero es mejor dejar en la oficina los problemas relacionados con el trabajo. Claro, una o dos quejas están bien, pero ser constantemente negativo sobre el tema va a alejar a la gente (y si después necesitas una recomendación, será difícil obtenerla).
Si tienes síntomas depresivos, sin duda emites energía negativa. La depresión grave no es una broma y tampoco es tu culpa, pero si te niegas a buscar ayuda profesional para restablecer tu equilibrio, estás en un problema grave que te afecta a ti y a quienes te rodean.
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La seguridad no es algo que abunde en ti. Nadie te hace sentir confianza, sin importar de quién se trate, por lo que siempre estás a la defensiva. La confianza es un factor muy importante en las amistades y las relaciones en pareja, y sin ella no se puede ir a lo profundo y verdadero. Tienes que trabajar en bajar la guardia para que la energía negativa disminuya.
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Vivir en el pasado no te deja avanzar y crecer en la vida; mantenerte ahí te impedirá perseguir tus objetivos y construir la vida de tus sueños. La energía negativa se prenderá de ti si no dejas que tu pasado se vaya. Es hora de poner la vista en el futuro y comenzar a emitir vibraciones positivas.
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Con información de Bolde