Uno de los principales problemas de salud presentes en la mayoría de las personas se encuentran en el intestino. Dime, ¿te suena familiar alguna de estás frases?
Si es así, déjame informarte que tienes problemas digestivos graves. Pero no te preocupes: no es nada que no se pueda solucionar con una buena alimentación.
Es por ello que es de suma importancia darle lo mejor a nuestro aparato digestivo. Una alimentación balanceada que incluya leguminosas, cereales como la cebada y la avena, frutas, verduras y lácteos como el yoghurt con probióticos, es clave para mejorar la microbiota intestinal.
Le llamamos microbiota intestinal al conjunto de microorganismos que viven en nuestro sistema digestivo, como son las bacterias, hongos o levaduras. Estos trabajan en conjunto para ayudarnos a mantener una salud digestiva invaluable. Si alimentamos correctamente a nuestra microbiota, con alimentos prebióticos y probióticos, nuestros problemas digestivos pueden desaparecer.
No olvides que somos lo que comemos, y es por ello que si aprendes a elegir lo mejor, tendrás como consecuencia una mejor salud.