Si quieres estar saludable y bajar de peso o mantenerte, un aspecto primordial es llevar una dieta balanceada. Para ello necesitas vencer los antojos de todas esas cosas que te encantan, pero que sabotearían tus esfuerzos por alimentarte sanamente. Además de la fuerza de voluntad, estos tips te ayudarán a lograrlo.
Si tus antojos suelen ser de cosas dulces, pueden deberse a una necesidad de glucosa en el organismo. Para satisfacerla de manera saludable, lo ideal es comer una fruta, como una taza de fresas, uvas o sandía picada, la mitad de un mango o un plátano.
Si lo que se te antoja es específicamente un chocolate, puedes comer una barra pequeña de chocolate oscuro, ya que su sabor saciará el antojo, sin las calorías y el azúcar que aporta el chocolate con leche.
Otra opción es comer una cucharadita de crema de cacahuate, ya que tiene proteína y calorías para que sientas algo de saciedad y su sabor es lo suficientemente dulce como para que el antojo desaparezca.
Si el antojo no surge por necesidad de glucosa, desaparecerá solo después de algunos minutos. Lo que puedes hacer es tomar un poco de agua o un té frutal y esperar a que pase. Y si crees que se debe a que estás estresado, sal a caminar un momento para despejarte.
Los expertos en nutrición recomiendan hacer cinco comidas al día, al intercalar un par de colaciones entre desayuno, comida y cena. Al comer varias veces al día, el cuerpo obtiene constantemente los nutrientes que necesita para funcionar adecuadamente y así evitas los antojos.
Es importante que tus tres comidas y las dos colaciones sean saludables y balanceadas. Entre los alimentos que puedes incluir como colación se encuentran las frutas y verduras, cereales, frutos secos (almendras, nueces, arándanos) o un tazón pequeño de palomitas.
Si basta con ir a la cocina o abrir el cajón de tu escritorio para encontrar todo aquello que sacia tus antojos poco saludables, difícilmente lograrás vencerlos.
En cambio, si conseguirlos implica ir a la tienda, será más fácil que desistas de hacerlo. Por eso, te recomendamos no tener ni en la casa ni en la oficina todas esas cosas dulces o grasosas que se te suelen antojar entre comidas.
Finalmente, como no se trata de dejar para siempre lo que tanto disfrutas, date el gusto unas dos veces por mes. Si has logrado resistirte a tus antojos durante 2 semanas, consiéntete y ve por tu postre favorito, pero toma una porción pequeña.
El secreto no está en restringir, sino en que comas de forma balanceada y te moderes en lo que respecta a las harinas, los azúcares y las grasas.