El envío de mensajes con contenido sexual es parte de las relaciones de pareja o incluso de la cultura del sexo casual. Esto es parte ineludible de la tecnología: es imposible que no se utilice también para conectar sexualmente. Ante esto, surge la pregunta si el sexting es benéfico para las relaciones, algo que han intentado responder los investigadores.

Se sabe que actualmente en Estados Unidos ocho de cada 10 personas está o ha estado sexteando. Un nuevo estudio realizado por investigadores de las universidades de Indiana y de Purdue intentó descubrir si estas personas habían tenido experiencias positivas enviando mensajes con contenido sexual.  

En la investigación se descubrió que quienes suelen empezar a sextear antes de tener 18 años de edad, lo hacen generalmente porque creen que es una manera divertidad de coquetear. Sin embargo, el estudió halló que muchos individuos se arrepienten o se preocupan de que las fotos que enviaron a sus parejas puedan ser mal usadas y en un futuro puedan provocar incomodidad.

Las mujeres reportan menos actitudes positivas con respecto al sexting, y en general las personas no consideran que este hábito sea en líneas generales positivo, aunque esto tiene el sesgo de que en la investigación se examinaron las prácticas de jóvenes adultos, por lo que quizás pueda ser diferente en el caso de parejas establecidas por más tiempo, las cuales son más estables y quizás no tengan estrés por dónde pueden acabar sus fotos.

Pese a que el sexteo conlleva riesgos, particularmente ante fenómenos como el llamado "porno de revancha", es difícil pensar que no será cada vez más popular, ya que está ligado a un deseo fundamental de comunicación y excitación, e incluso al placer que genera correr un riesgo. Quizás habría que desarrollar herramientas para que esto pueda hacerse de manera segura, como podemos encontrar en algunos sitios que tienen la función de que las imágenes que envías no pueden ser guardadas y desaparecen después de un corto periodo.