El documental abre con Diana Fabianova preguntando a los peatones en una calle: “Cuando escuchas la palabra menstruación, ¿qué viene a tu mente?”. Algunos de sus interlocutores se congelan frente a la pregunta y no logran poner sus pensamientos en orden, otros se ríen, algunos más se disculpan y alejan. Alguno no duda en afirmar que “Es una enfermedad terrible”. Esa pequeña introducción deja muy claros los prejuicios alrededor de la menstruación. De acuerdo con Fabianova, la documentalista a cargo de La luna en ti, a diferencia de otras funciones y secreciones fisiológicas la menstruación no es únicamente física, sino también emocional. En sus propias palabras, la menstruación: “Es un símbolo de feminidad. Un símbolo de feminidad que se percibe como algo impuro. Es el mensaje que recibimos sobre nosotras mismas, sobre nuestros cuerpos”.

Es justamente ese último punto el que va cobrando relevancia conforme miramos el documental y nos damos cuenta de que el tratamiento que socialmente le damos a la menstruación tiene mucho que decir de nuestros problemas como sociedad. Fabianova reta la idea de que la menstruación ya no es un tabú, argumentando que no es algo que las mujeres puedan vivir como algo público. Por el contrario, hay muchas reglas tácitas sobre dónde y con quién se puede hablar de la menstruación y cómo ésta debe ocultarse cuando sucede.

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En una plática para TED, la documentalista comparte una anécdota de cuando intentó vender el documental a una cadena norteamericana y recibió como respuesta que nunca podría ser transmitido al aire. Primero que nada, porque había una escena en la que se puede ver a una madre con su hija caminando por la calle con huellas de sangrado menstrual en su ropa, como una forma de evidenciar lo oculto. Fabianova no pierde la oportunidad de ironizar sobre cómo la televisión continuamente transmite imágenes de violencia donde hay sangre, muerte, amputaciones y demás, pero la sangre menstrual permanece prohibida por ser diferente e “impura”. En segundo lugar existe otra escena en el documental donde una ginecóloga explica cómo el orgasmo femenino es más eficiente para aliviar los cólicos que un analgésico. La doctora aclara que el orgasmo puede ser alcanzado a través de la masturbación, y esto último desagradó al presentador de la cadena de televisión.

El hecho de que eliminar el velo que cubre a la menstruación en la televisión pública resulte transgresor, ciertamente invita a la reflexión. ¿Qué pasaría si un día las mujeres dejaran de rechazar su sangre y su cuerpo?, ¿qué fuerzas serían capaces de albergar?, ¿qué cosas se volverían capaces de lograr si no se vieran a sí mismas como “impuras”?. Te compartimos el documental a continuación; seguramente, no volverás a ver la menstruación de la misma manera.

Con información de “La luna en ti”