Cuando una relación de pareja inicia, el enamoramiento hace que las emociones estén en un nivel de intensidad muy alto, por lo que las muestras de afecto son frecuentes y constantes, y el sexo ocupa un lugar muy importante en la dinámica de la relación.
Conforme el tiempo pasa, el enamoramiento da paso a una etapa en la cual los integrantes de la pareja se conocen mejor y aprenden a aceptarse con todo y sus defectos, y a trabajar juntos para mejorarlos.
Si la relación sigue y pasa a un plano más formal y con miras hacia un largo plazo, es probable que se planteen la idea de vivir juntos o de casarse. Esta nueva etapa trae consigo nuevas responsabilidades para la pareja, así como un mayor compromiso.
Con el paso de los años, puede que las actividades y responsabilidades de ambos, así como la rutina de estar tanto tiempo juntos, los haga caer en la monotonía y se olviden de que el romance, los besos interminables y las largas sesiones de sexo todavía son necesarios para mantener viva la relación.
Por eso, es importante mantener encendida la llama de la pasión y darle a la sexualidad su lugar dentro de la nueva dinámica de pareja. A continuación, algunos consejos para lograrlo.
Recuerden por qué se enamoraron. Tengan presente lo que les atrajo mutuamente y revivan esa primera etapa de enamoramiento, en la que el estómago se encogía y las rodillas temblaban cada vez que se iban a ver. Sé detallista con tu pareja como lo eras antes y sorpréndelo con una repentina sesión de besos, o con un masaje relajante.
Evita caer en la rutina sexual. Si algo puede matar una relación es la rutina, sobre todo cuando se instala en el terreno sexual y hace que los encuentros se den más como una obligación que por placer. Siempre ten en cuenta lo que a ambos les gusta y busca innovar al incorporar el uso de juguetes, al cumplir algunas de sus fantasías o al leer libros eróticos que pueden encender el deseo y darte nuevas ideas para poner en práctica.
Acéptate y no dejes de cuidarte. Aunque es cierto que cada persona debe quererse y aceptarse tal como es, también es real que es importante saberse y sentirse atractivo para agradar a la pareja.
¿Recuerdas el esmero que ponías al inicio de la relación para verte impecable cuando ibas a ver a tu amor? Pues vuelve a hacerlo; saca las prendas que tienes guardadas para una ocasión especial y úsalas cuando estés con tu pareja: qué ocasión más especial que la de estar juntos.
Además, cuida tu cuerpo, trátalo bien, haz ejercicio y come sanamente. Haz cosas que te hagan sentir bien. Lleva ropa que te guste. En fin, ámate a ti mismo para que ese amor se proyecte también en tu pareja.
Date placer a ti mismo. La masturbación no sólo se realiza cuando no se tiene pareja. Puede practicarse junto a la persona que amas mientras ella te observa, pueden hacerlo mutuamente, o puedes hacerlo en solitario para conocer mejor tu cuerpo y lo que lo hace vibrar, así como para despertar tu deseo, si es que sientes que ha disminuido.
Dale al sexo su tiempo y espacio. Si ya planeaste un momento de placer con tu pareja, no dejes que nada se interponga para que lo lleven a cabo. Y mientras comparten ese momento íntimo, procura dejar fuera de tu cabeza cualquier problema o preocupación y dedícate sólo a disfrutar y hacer disfrutar. Además, tómense su tiempo y háganlo sin prisas.
Con información de The Guardian