Salir de viaje es emocionante, pero también implica salir de nuestra zona de confort, de tal manera que mientras conocemos lugares nuevos, realizamos actividades distintas a las de nuestra rutina, posamos nuestros ojos por paisajes o emprendemos alguna aventura, nuestra mente se renueva. Por otro lado, todos aquellos detalles con los que has personalizado el ambiente que habitas para que se adapten específicamente a tus gustos, hábitos y necesidades desaparecen. Esto puede generarnos incomodidad, malestar o un poco de ansiedad. Después de todo, cuando la rutina cambia los resultados dejan de ser predecibles, y la incertidumbre es algo a lo que usualmente tememos. Afortunadamente, hay cosas que podemos hacer para diseñar nuestras vacaciones antes de salir de casa y que pueden llegar a prevenir algunos retos, incomodidades y complicaciones.
Algo fundamental es que primero conozcamos cuáles son nuestras necesidades, de tal manera que podamos encontrar el lugar más apropiado para satisfacerlas. Considerar los siguientes puntos te puede ayudar a evaluar qué es lo que necesitas:
1. ¿Con quién viajas?
No es lo mismo viajar solo que con un amigo, un grupo, pareja, niños pequeños o adultos mayores. Cada quien tiene necesidades diferentes y con quién compartimos el viaje también es parte de la experiencia. Lo mejor es considerar las necesidades individuales y colectivas antes de salir de casa.
2. ¿A dónde quieres ir?
El destino definirá qué preparativos necesitarás realizar. Si tu viaje será al extranjero, tendrás que contar con un pasaporte y averiguar sobre los requerimientos de visa para tu destino. En algunos casos también necesitarás ponerte algunas vacunas y hacer algo de investigación sobre la cultura que visitarás. Por otro lado, si quieres aprovechar unos días libres para conocer un lugar nuevo pero no tienes definido el sitio, puedes empezar por preguntarte cosas más específicas sobre a dónde te gustaría ir. ¿Quieres ir a una playa o prefieres el bosque? ¿Te interesaría visitar otra ciudad o preferirías un pequeño poblado? ¿Preferirías un resort con todo incluido o una experiencia austera?
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3. ¿Qué es lo más importante para ti?
Quizá has pasado mucho tiempo trabajando y te sientes agotado, así que lo que deseas en tus vacaciones es dormir, comer e ir a la playa; entonces tus prioridades son una habitación cómoda con una cama firme, un ambiente tranquilo, un hospedaje con alimentos incluidos y cercano a la costa. En cambio, si lo que te interesa es probar la vida nocturna, entonces querrás un lugar estratégicamente ubicado con ese propósito. Si quieres realizar alguna actividad como caminatas, rafting, tirolesa u otros deportes de aventura, tu ubicación deberá ofrecer estos servicios. Si viajas con un adulto mayor con problemas de movilidad, probablemente querrás que las instalaciones tengan rampas para sillas de ruedas u otros detalles para apoyarlos. Si viajas con niños, busca un destino donde tus pequeños también se puedan divertir.
4. ¿Cuál es tu presupuesto?
Una vez que sabes cuáles son tus prioridades, puedes buscar cómo obtener lo más cercano a lo que quieres con tu presupuesto. Actualmente existen varios sitios web donde puedes consultar información sobre hoteles de todo tipo, así como hostales con dormitorios compartidos para los mochileros o quienes viajan en grupo. También hay aplicaciones que te permiten subarrendar por unos días una habitación o propiedad completa. Otras plataformas ofrecen servicios de hospitalidad a través del intercambio. Elige la que mejor se adapte a tus necesidades.
Si quieres saber más sobre qué sitios web y aplicaciones puedes utilizar a para encontrar el hospedaje ideal para tus vacaciones puedes leer aquí lo que hemos escrito al respecto.
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