Durante los últimos meses te han dicho cómo lavar tus manos, tu ropa, tus zapatos, tus cubrebocas, tu comida, tus compras del súper, entre otras cosas para prevenir el contagio del nuevo coronavirus y que éste no entre en contacto con ojos nariz y boca, pero ¿qué sucede con los usuarios de anteojos?
Usar anteojos puede agregar una capa de protección aunque no ofrecen una seguridad del 100% ni reemplazan las gafas de protección, debido a que el virus puede llegar a los ojos por los extremos y la parte superior e inferior del ojo. Los usuarios de lentes oftálmicas deben mantener medidas de limpieza por la cercanía que tienen con los ojos, ya que de una u otra forma son manipulados al retirarlos, colocarlos y ajustarlos en el rostro.
Aunque el riesgo de contagio por esta vía es mínimo, se recomienda realizar una limpieza adecuada después de estar expuesto a las secreciones respiratorias de otras personas o haberlas tocado después de palpar superficies expuestas.
Aquí 10 recomendaciones de los expertos de Essilor México para realizar la limpieza correcta de los anteojos y las lentes. Además, estos cuidados permitirán que durante el tiempo que tardes en regresar a una nueva revisión de la vista se mantengan en el mejor estado posible.
1. Lava tus manos antes de limpiar los lentes, esto ayudará a que tus manos estén libres de polvo o grasa y no dificulten la limpieza de los mismos.
2. No los limpies en seco, pásalos por el chorro de agua para eliminar el polvo que puedan tener, esto evitará que se rayen.
3. Si es necesario puedes utilizar jabón neutro para eliminar el exceso de grasa de las lentes. Utiliza las yemas de tus dedos para frotar suavemente ambos lados de las lentes, enjuaga a chorro de agua y con tu microfibra o paño quita el excedente de agua de las superficies.
4. Lava las almohadillas o plaquetas que descansan sobre tu nariz, al igual que la parte de las varillas que rodean tus orejas, con esto eliminarás el sudor y/o maquillaje.
5. Solicita a tu profesional de la salud visual el cambio de almohadillas o plaquetas cuando se vean amarillas, mantendrás una mejor apariencia.
6. Acude con un profesional de la salud visual para la reposición de tu microfibra o paño en caso de que se dañe o pierda. Evita usar tu ropa, servilletas o cualquier tipo de tela para su limpieza.
7. Si tus anteojos se resbalan o bajan constantemente pídele a tu profesional de la salud visual que realice un ajuste, lo cual evitará que lleves tus manos a la cara.
8. Cuando no uses tus lentes guárdalos en su estuche para protegerlos de rayaduras o roturas por accidente.
9. Evita limpiar tus lentes con agua caliente, acetona, alcohol, remedios caseros como la pasta de dientes o el vinagre, esto daña los tratamientos antirreflejantes y antirrayas de tus lentes.
10. Pregunta en tu óptica de confianza sobre la limpieza ultrasónica, que ayudará a eliminar la suciedad y grasa acumulada en los anteojos.