Si te preocupas por mantenerte saludable, comer balanceadamente, hacer ejercicio y cuidar tu cuerpo es básico. Sin embargo, nunca sobran algunos tips que pueden ayudarte a mantener y mejorar tu estilo de vida sano:

1. Estírate al despertar. Realiza estiramientos en cuanto te levantes de la cama. Activarán tu sistema circulatorio y tus terminales nerviosas  y te ayudarán a despertarte mejor.
2. Cuida tu higiene dental. Cepillarse los dientes tres veces al día parece suficiente pero no lo es. Usa hilo dental por lo menos una vez a la semana y enjuague bucal antes de irte a la cama.
3. Protege tus huesos. No descuides tu ración diaria de calcio que puedes obtener de alimentos lácteos, principalmente la leche y el yoghurt.
4. Que no te falten tomates. Los tomates o jitomates son un súper vegetal lleno de nutrimentos, vitamina C, B y Potasio. Hay muchas formas de prepararlos y se llevan con todo.
5. No te deshidrates. Consume por lo menos 2 litros de agua al día. Despierta con un vaso de agua y bebe otro antes de irte a dormir, te ayudarán a mejorar tu digestión.
6. Activa tu metabolismo. Realiza por lo menos 5 comidas diarias. Distribuir los alimentos a lo largo del día hará que tu metabolismo se mantenga trabajando.
7. Refuerza tu sistema inmune. La vitamina A, que puedes obtener de tubérculos como la zanahoria, ayuda a tu sistema inmune a producir defensas contra enfermedades.
8. No subestimes las hormonas. Consumir productos de origen animal tratados con hormonas puede ser un riesgo para tu salud, tómate el tiempo de investigar de dónde viene lo que comes.
9. Usa bloqueador solar todos los días. No importa si hace frío o está nublado, los rayos solares que afectan tu piel no están relacionados con el clima. No salgas de casa sin bloqueador.
10. Lava tu toalla dos veces por semana. Nunca te seques con una toalla sucia. La humedad en las toallas propicia el ambiente ideal para la aparición de hongos e infecciones.
11. Reduce tu consumo de azúcar y harina refinada. Los alimentos altos en azúcares aportan muchas calorías y pocos nutrimentos al organismo. Si es posible evítalos o consúmelos con moderación.
12. Y no te saltes el desayuno. El desayuno es la comida más importante del día, tu mamá siempre te lo dijo y ahora la ciencia lo corrobora.