Dicen que el desayuno es la parte más importante del día y que lo que comas va a tener un impacto en tu día en general. Ya sea que te despiertes muy temprano o un poco tarde, puedes optar por este tipo de desayunos conforme a tu estilo de vida, tus actividades diarias y al horario en que comience tu día, para así tener la energía necesaria para hacer tus tareas.
El madrugador que hace ejercicio
Si eres de las personas que se despierta muy temprano para poder realizar alguna actividad física, entonces necesitarás un desayuno que te ayude a recuperar toda esa energía. De acuerdo con Daily Harvest, puedes optar por avena con yogurt y tu fruta favorita.
Se dice que si eres una persona muy activa fìsicamente es bueno que desayunes avena ya que el magnesio, el potasio y el silicio proporcionan una liberación sostenida de energía, como un carbohidrato de bajo índice glucémico (también conocido como carbohidratos que no elevan el nivel de azúcar en la sangre). Así que puede ser tu mejor opción para que te recuperes después del esfuerzo físico y mantengas la energía a lo largo del día.
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El experto en meditación
Puede que también te despiertes temprano para meditar o hacer yoga. Si eres de este tipo de persona, entonces también te gustará disfrutar de tu desayuno. Puedes preparar un omelet con huevos y verdura y acompañarlo con un té herbal de tu preferencia.
Si te gusta tomarte la mañana de forma ligera y relajada, contemplar lo que harás en el día e inclusive apuntar todo lo que tienes que hacer para organizar el día, entonces puedes también tomarte tu tiempo para preparar e ingerir tu desayuno, así que puedes consentirte con algo saludable y delicioso, aunque sea más elaborado. Haz del desayuno, desde su preparación hasta su consumo, parte de tu rutina mindfulness diaria y date el tiempo suficiente para cocinarlo y saborearlo.
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El que llega tarde
Si eres de aquellos que por más que quieran nunca pueden llegar a tiempo a la oficina, esto quiere decir que necesitas un desayuno para preparar rápidamente. En este caso tu mejor aliado para el desayuno puede ser un licuado o smoothie, ya sea con alguna proteína en polvo, solamente con frutas y verduras, o bien con yogurt o tu leche vegetal preferida. Prepararlo no te toma más de 5 minutos, así que puedes levantarte un poco antes para no salir de casa sin desayunar.
Lo mejor que puedes hacer es que tu batido contenga todo lo necesario para que no pases hambre: el tipo de leche o base de agua o jugo que prefieras, proteína, grasas naturales que puedes obtener de los frutos secos, fibra que puedes agregar con cereales integrales, además de algún tipo de fruta y verdura. De esta forma será lo más completo posible y no te de hambre por lo menos en un par de horas.
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El que se desvela mucho
¿Por más que intentas dormir temprano, no puedes? Tal vez necesites un desayuno que te brinde mucha energía para el día siguiente. Si te gusta el café, puedes optar por acompañar un desayuno lleno de proteína con una taza de café.
Ahora bien, si prefieres no consumir cafeína, puedes optar por alimentos que contengan grasas naturales, ya que el 60% de tu cerebro es grasa y por lo tanto necesita de la misma para funcionar de forma óptima. Algunos alimentos que contienen grasas saludables son: aguacate, semillas de chía, cacao, nueces, almendras, atún, salmón, coco y quinoa.
El parrandero
¿Te encanta salir de fiesta entre semana? Si es así, entonces seguramente se te va a antojar algo grasoso como la comida rápida, sin embargo, no es la mejor opción ya que te hará sentir mucho más cansado que si solamente tuvieras resaca.
Si se te antoja un sandwich puedes optar por alguna variedad casera que contenga grasas saludables como el aguacate. Combínalo con queso panela, lechuga y un poco de pechuga de pollo asada y crea un snack que te ayudará a subir tus niveles de potasio después de la deshidratación causada por el alcohol.
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