Hace unos días, la Alianza por la Salud Alimentaria y la coalición México Salud-Hable hicieron un llamado al gobierno federal de México para que realice un incremento al impuesto a productos como alcohol, tabaco, bebidas azucaradas y el conjunto de alimentos conocidos como “comida chatarra”.
Según datos de dichas organizaciones, los productos mencionados fueron la causa de más de 126 mil muertes en 2017 (18% de las muertes totales en ese año), por lo que consideran importante evitar o, al menos, reducir considerablemente su consumo.
Como respuesta ante esta propuesta, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que no se aumentarán dichos impuestos, sino que se emprenderá una intensa y amplia campaña de educación para la salud, con el fin de que las personas adquieran hábitos saludables y eviten el consumo excesivo de productos que afectan su bienestar.
“Tenemos muchos problemas de diabetes, de hipertensión, del corazón, de vías urinarias, serios problemas, que no va a resolver sólo la medicina curativa, tenemos que prevenir y la alimentación es fundamental”, dijo el presidente
El mandatario agregó que se van a usar todos los tiempos oficiales en radio y televisión para orientar a la población y fomentar la buena alimentación, lo cual, aclaró, no es sinónimo de comer mucho, sino de comer bien al incluir en la dieta alimentos nutritivos.
Además, se explicará que alimentarse sanamente no significa tener que gastar más, pues en el país se producen alimentos de muy buena calidad y a precios accesibles, que deben ser revalorados.