Cuando somos mamás nos volvemos expertas en enfermedades y remedios, sobre todo con malestares digestivos. Pero si eres de las que no lo son, entonces podemos confundir esos dolores y no atenderlos de la manera correcta. Así que me pareció buena idea hacer una pequeña guía sobre malestares digestivos y cómo evitarlos:
Tránsito lento. Esta es muy común si no tienes un consumo de fibra y se refiere a esa sensación de no evacuar completamente, que hagas un esfuerzo excesivo para lograrlo, etc.
Acidez estomacal. Yo sufro de ella y es lo peor. Es un ardor que sube por tu garganta y cara; en ocasiones puedes sentir como asciende un tipo de líquido de sabor ácido o agrio, o de alimentos.
Diarrea. Al contrario del tránsito lento, la diarrea es el exceso de evacuación, líquida o pastosa. Es muy común que te suceda cuando un alimento no te “cae bien”.
Sensación de inflamación. Esto se asocia con distintas causas como comer de más, comer con prisa, comer a deshoras o factores de estrés, que genera una sensación de distención y pesadez.
Síndrome de Intestino Irritable. Este es muy común y es el conjunto de síntomas como gases, dolor en el estómago y diarrea o tránsito lento.
Para evitar cualquiera de estos malestares digestivos te recomiendo:
- Hacer de 3 a 5 comidas pequeñas que incluyan fibra, cereales, frutas, verduras y lácteos, como el yoghurt.
- Evitar consumir bebidas azucaradas y alimentos condimentados.
- Incluir en tu dieta lácteos con probióticos, como el yoghurt.
- Darte el tiempo de comer despacio y masticar bien la comida.
- Hacer ejercicio al menos 30 minutos diarios.