El cansancio y la fatiga son queja común entre niños, jóvenes y adultos en la actualidad. Ambos hacen que sea difícil iniciar o mantener actividades voluntarias y se han asociado a diferentes patrones en la dieta, lo que ha sido tema de interés para investigadores.
La nutrióloga Marien Garza, miembro del Consejo Consultor de Nutriólogos de Herbalife Nutrition explica que la alimentación con una connotación emocional sugiere que un adulto joven y sano suele disminuir su ingesta de alimentos cuando se encuentra bajo mucha presión, estrés mental o cansancio. "También a través de la presión, el estrés y el cansancio podemos caer en hábitos alimenticios no saludables como el exceso en el consumo de azúcares refinados y grasas saturadas", señala la especialista.
Andrew Well, experto en medicina integrativa y autor del best seller Eating Well for Optimum Health (2000), menciona que los episodios de baja en la energía de las personas normalmente ocurren debido a deficiencias en la dieta diaria, falta de ejercicio, adicción a sustancias nocivas, mal descanso y depresión.
La nutrióloga indica que es importante identificar aquellos alimentos que mantienen el cuerpo en buen balance y con energía, por lo que brinda algunos consejos que te ayudarán a disminuir el cansancio:
Elige alimentos no procesados. Cuando el estrés y el cansancio llegan, el antojo de alguna golosina aparece momentáneamente; sin embargo, su valor nutrimental es bajo y al final suelen ser productos que te ralentizan e incrementan la fatiga.
Consume alimentos frescos. La mejor decisión en cuanto a tu alimentación es elegir frutas y verduras de temporada que te llenen de vitaminas, minerales y fitonutrientes. Además, las frutas y verduras proveen de una gran carga de antioxidantes que brindan muchos beneficios para combatir el envejecimiento y por ende te hacen sentirte mejor y con más energía.
Tomar agua. El agua es esencial para el funcionamiento óptimo del cuerpo humano. Aunque el agua no proporciona energía en forma de calorías, ayuda a facilitar los procesos energéticos en el cuerpo, lo que es un impulso de energía en sí mismo.
Consume diferentes tipos de nueces. Este alimento es ideal para combatir la fatiga y el hambre. Las nueces son una excelente fuente de proteína y grasas monoinsaturadas que te ayuda a mantenerte en equilibrio y con energía. Elige tus favoritas: almendras, nuez de la India, nuez de Castilla, cacahuates, pistaches o avellanas.
Bebe té verde. Es fuente de antioxidantes y preparado con agua, también hidrata. El té verde es una bebida milenariamente consumida y asociada a la longevidad y el bienestar.
Mejorar la calidad de vida a través de una dieta saludable, hacer ejercicio, una buena suplementación, tomar agua y descansar bien, te brindarán la energía que tu día demande.