La ley  de la vibración es la diferencia entre la mente y la materia, entre el mundo físico y no físico. La ley dice que todo vibra o se mueve, nada permanece inactivo. Todo está en un estado constante de movimiento, y por lo tanto, no hay tal cosa como la "inercia", o un estado de reposo. El sonido es vibración y, como tal, nos afecta física, emocional y mentalmente. Tenemos que tomar conciencia de que partiendo de lo más etéreo, y hasta la más importante forma de la materia, todo está en un constante estado de vibración, lo cual nos incluye a cada persona en este planeta y a ti que lees este artículo.

Si has escuchado hablar de la ley de la atracción es importante que te mencione que, para que ésta se manifieste, antes se necesita dominar la vibración, ya que de ella parte lo que somos, y de ahí lo que atraemos. Así que si has leído y visto información sobre la ley de atracción, el secreto, etc., te pido que pongas tu mente en blanco y tomes en cuenta la vibración como la base para empezar a construir sobre cimientos firmes y que no construyas castillos de cristal.

El universo entero es energía que se manifiesta en todos los grados de vibración. Los índices de vibración se llaman frecuencias y cuanto mayor sea la frecuencia, más se potencia la fuerza; y de este principio partimos a lo que nos responsabiliza de quiénes somos y lo que queremos en nuestra vida. Todas las peronas desean felicidad, abundancia, paz y armonía y el pensamiento es una de las formas más altas de vibración; sí, lo voy a escribir en mayúsculas: EL PENSAMIENTO ES UNA DE LAS FORMAS MÁS ALTAS DE VIBRACIÓN. Por esta razón es que debemos pensar en positivo si queremos atraer a nuestras vidas cosas positivas. Recuerda: en los artículos pasados he mencionado que una vibración siempre sigue a la otra, sí o sí…

Vibra en amor, en prosperidad, en abundancia, en alegría y lo atraerás

La mente ejerce control sobre el cuerpo a través de la ley de vibración. Cada pensamiento es una vibración, cada vibración cambia nuestro cuerpo; si deseamos cambiar las formas, tenemos que cambiar la vibración. En resumen, si cambiamos de vibración, cambiaremos la condición de nuestro cuerpo físico. ¿Y qué tiene que ver el sonido con todo lo anterior? La música ha tenido gran influencia en la sociedad a través de los años; desde la época de los grandes filósofos en Esparta y Atenas se luchaba por tener el control sobre lo que escuchaban los ciudadanos. No sólo fue en esta cultura sino también en la India, China y Egipto.

Aristóteles decía que “la música imita directamente las pasiones o estados del alma”. Por esto, cuando las personas escuchan determinado género musical se sienten invadidas por estos sentimientos. Por ejemplo, una persona que escuche música romántica, dependiendo de lo que diga la letra va a sentirse nostálgico porque perdió un amor, o feliz por estar enamorado y haber encontrado al amor de su vida. Por esta razón se piensa que la música tiene diferente significado para cada individuo. Sin embargo, tiene una vibración; el propósito por la que fue creada contiene una información que va influir en tu vibración haciendo que ésta baje o suba y desde este estado de vibración atraerás situaciones y personas que vibren bajo o alto, con sus respectivas consecuencias.

Te invito a leer el próximo artículo de la semana, en donde continuaremos hablado del tema de la vibración.