El mal aliento surge por los restos de alimentos que se quedan entre tus dientes y propician la propagación de bacterias. Así, la causa más común del mal aliento es la falta de higiene bucal. Si no lavas tus dientes de manera adecuada, las bacterias crecen y se reproducen y se comienza a generar la conocida placa dental.
Cuando la placa no se elimina con un buen cepillado al menos dos veces al día, produce un olor fétido y conduce a otro proceso maloliente, doloroso y que ponen en riesgo los dientes: la caries.
Todos los alimentos se atascan en los dientes, pero algunos como las cebollas y el ajo comúnmente llevan al mal aliento. La digestión de estos alimentos libera compuestos de azufre en el torrente sanguíneo y cuando la sangre llega a los pulmones esto afecta tu aliento.
Las pastas dentales comunes y los productos de higiene bucal suelen tener muchos compuestos químicos que resultan tóxicos para tu salud. Por ello, es mucho mejor optar por productos naturales, que además son más amigables con el medioambiente.
El perejil es un remedio popular para el mal aliento. Por su aroma fresco y su alto contenido en clorofila, puede tener un efecto desodorante. A la par, diversos estudios han demostrado que el perejil puede combatir eficazmente los compuestos fétidos de azufre.
Para usar perejil para el mal aliento, mastica hojas frescas después de cada comida, o puedes también conseguir suplementos que lo contengan.
El té verde es un remedio casero eficaz para el mal aliento. Diversas investigaciones han demostrado que tiene propiedades desinfectantes y desodorizantes que pueden refrescar temporalmente el aliento. La menta tiene efectos similares, así que una taza de té de menta verde puede ser un refrescante ideal para el aliento.
Muchas personas creen que el jugo de piña es el tratamiento más rápido y efectivo para el mal aliento. Aunque no existe evidencia científica que respalde esta teoría, los informes anecdóticos sugieren que sí funciona.
Bebe un vaso de jugo de piña orgánico después de cada comida, o mastica una rodaja de piña durante uno o dos minutos. También es importante que te enjuagues con un poco de agua el azúcar residual de la fruta.
Las sales del zinc son un ingrediente en algunos enjuagues bucales y gomas de mascar para contrarrestar el mal aliento. El zinc disminuye los compuestos sulfurosos de tu boca. En varios estudios se ha encontrado que enjuagarte regularmente la boca con una solución que contenga zinc puede ser efectivo para reducir el mal aliento por al menos 6 meses.
Esta es de una tradición antigua en la cual en lugar de utilizar enjuagues bucales se hace uso del aceite de coco, ya que ayuda a remover bacterias y promueve en general la higiene bucal. También tiene propiedades antinflamatorias. Y lo mejor de todo es que es algo relativamente barato y que puedes encontrar en muchos lugares. Para utilizarlo: