El alcohol es una sustancia adictiva sumamente común. Su carácter de legal, así como la facilidad con que puede adquirirse, la han dotado de una popularidad que concierne a una gran mayoría de los habitantes del país.

Según la OMS, 3.3 millones de personas fallecen cada año como consecuencia del abuso en el consumo de alcohol. No obstante, del 2003 al 2010 la ingesta de alcohol entre la población mexicana se incrementó de 5.1 a 5.5 litros de líquido puro por persona al año. La misma OMS reporta que en México, en el año 2010, los hombres mayores de 15 años consumieron un promedio de 18 litros al año, mientras que las mujeres en el mismo segmento de edad consumieron cerca de 5.7 litros. Además, el 63% de la población que se identificó como consumidora de alcohol en el estudio oscila entre los 12 y los 24 años de edad.

Estas cifras son alarmantes. El consumo de alcohol afecta a una gran parte de la población y tiene consecuencias graves que tendemos a ignorar por la normalización de su consumo. Muchas personas inician a tomar alcohol por curiosidad, presión social, deseo de experimentar, problemas familiares, búsqueda de la aceptación y otras causas como depresión o ansiedad. Te recomendamos que ignores las formas de presión que puedas experimentar a lo largo de tu vida. Recuerda que tus decisiones son tuyas y de nadie más. Tienes derecho de cuidar tu cuerpo.

¿Por qué el cuerpo? Pues el consumo de alcohol también afecta la salud de las personas. Puede ocasionar malestares digestivos y efectos negativos en la piel, los órganos, la calidad del sueño y hasta el sistema inmune. Además de que esta bebida se vincula con el nacimiento de nuevas adicciones: de acuerdo con los datos del Centro Nacional para la Vigilancia Epidemiológica de la Secretaría de Salud, para el 47.9% de las personas que consumen alguna sustancia adictiva, el alcohol fue la primera droga de consumo.

Sabemos que la voluntad de tomar alcohol le pertenece a cada persona, pero queremos ayudarte a evitar problemas con este hábito. Por eso, te presentamos un test realizado por The National Council on Alcoholism and Drug Dependence (NCADD), donde podrás determinar si tu consumo de alcohol es normal o si se trata más bien de una adicción. En todo caso, nos interesa que consideres el bienestar de tu cuerpo y tu mente y basado en ello, decidas los hábitos que prefieres adquirir para tu vida.

El test está en inglés. Si quieres realizarlo, haz click aquí.