Antes de hacer ejercicio, debemos asegurarnos de que sea seguro (valga la redundancia). La Asociación Estadounidense de Medicina del Deporte recomienda seguir estos tres pasos para ayudarte a prevenir complicaciones al hacer ejercicio.
1. Calentamiento
Calienta durante 5 a 10 minutos con una caminata rápida o trotando a una intensidad ligera. El calentamiento prepara al sistema cardiorrespiratorio para las altas demandas que va a sufrir durante el entrenamiento, haciéndolo más seguro y efectivo. Además, aumenta la temperatura corporal y el flujo de sangre a los músculos, para que puedan consumir mejor el oxígeno y las articulaciones estén más lubricadas para moverse con libertad y prevenir complicaciones articulares.
2. Enfriamiento
Un enfriamiento adecuado permite que los latidos del corazón y la respiración vuelvan gradualmente a la normalidad. Esto disminuye el riesgo de mareos, desmayos e incluso arritmias cardíacas después del ejercicio. Puedes enfriar realizando una caminata rápida durante 5 a 10 minutos después de haber terminado el esfuerzo de tu rutina.
3. Estiramiento
El estiramiento debe realizarse después de la actividad física y el enfriamiento. Mejora la movilidad de las articulaciones y previene lesiones. Además, está comprobado que realizar estiramientos mejora el desempeño atlético.