Cuando se trata de fuerza funcional, no hay nada mejor que el entrenamiento de músculos nucleares. Los abdominales, oblicuos y músculos traseros mejoran tu postura y soportan otros músculos a lo largo de tu columna. De esta forma, se reduce el riesgo de tener una lesión.

Durante muchos años, la regla de oro para activar este grupo muscular era hacer abdominales, ¡muchos! Pero recientemente, han perdido popularidad en algunos círculos. Algunos profesionales del fitness argumentan que el movimiento para realizar este ejercicio podría hacer más mal que bien. También es cierto que no es el único tipo de movimiento que puedes realizar para fortalecer la zona media. 

¿Será que el problema es con los abdominales?, ¿o es la forma en que los haces? Algunos errores comunes que debes evitar son los siguientes:

• Hacerlos muy rápido. Te conviene ir despacio, porque mientras más tiempo estén involucrados los músculos, más fatiga creas. Con ello, es más rápido el proceso de creación de estructuras musculares largas y definidas.

• Poner demasiada presión en el cuello. Si no estás posicionado de forma correcta, esta práctica puede empeorar una mala postura y poner demasiada presión en la zona del cuello.  Si los haces con las manos en la nuca, usa tus músculos abdominales para levantar con suavidad tu cabeza y hombros, en lugar de jalarlos por medio del cuello.

• Dejar que tu cuerpo se contraiga. El movimiento debe ser hacia arriba, no hacia dentro. Dirige la parte alta de tu cuerpo hacia el cielo, no hacia tus rodillas. Siempre trata de mantener una posición de apertura, con tus codos apuntado a los lados, es decir, que no se cierren. Dejar que tu cuerpo se curve te puede traer problemas en la columna.

• Sólo hacer abdominales. Sé creativo. Si quieres fortalecer tu zona media de forma integral, construye una rutina de ejercicios alrededor de ese objetivo. Por ejemplo, incluye planchas, sentadillas o abdominales con los brazos cruzados frente al pecho, de lado, etcétera.

Con información de Well and Good