¿Alguna vez has hecho un burpee? Es un ejercicio muy utilizado dentro de los entrenamientos HIIT (entrenamiento de intervalos de alta intensidad) o también como parte de una serie cardiovascular; también es muy usado en crossfit.
Cualquiera que sea el lugar en donde los practiques, los burpees son un gran ejercicio que te permitirá trabajar con todo tu cuerpo y quemar una gran cantidad de calorías.
Son el máximo ejemplo de fitness funcional, lo que significa que no sólo pueden ayudarte a cumplir tus objetivos de pérdida de peso, sino que también pueden contribuir a que te desempeñes mejor durante las actividades cotidianas, como cargar los garrafones de agua o las bolsas con tus compras, levantar una maleta sobre tu cabeza en un avión o jugar con tu hijo en el parque. Según diversas investigaciones, estas capacidades de la aptitud física funcional pueden mejorar la calidad de vida.
A diferencia de los ejercicios de aislamiento, como las flexiones de bíceps y los retrocesos de tríceps, los burpees son un ejercicio de cuerpo entero. Eso significa que trabajarás casi todos los músculos de tu cuerpo, mientras también recibes una 'patada' cardiaca. Los burpees pueden hacer que todos los músculos del cuerpo suden (¡y duelan!), lo que los convierte en una valiosa adición a cualquier entrenamiento.
Además, si los haces rápidamente y con intensidad, obtendrás un impulso cardiovascular aún mayor y una quema de calorías que puede durar todo el día.
Ya que no requieres nada más que tu propio cuerpo para hacerlos, puedes realizarlos en cualquier lugar. No importa si viajas, si no tienes acceso a un gimnasio o si te ejercitas al aire libre, ¡todo lo que necesitas es tu cuerpo para hacer burpees!
Los ejercicios de peso corporal son increíbles, especialmente aquellos como los burpees que son de alta intensidad. Y como no necesitas ningún equipo, puedes integrarlos a cualquier entrenamiento
Son un ejercicio dinámico y de ritmo rápido, y un complemento perfecto para cualquier entrenamiento, ya sea que hagas una sesión al estilo HIIT o necesites un rápido entrenamiento a cualquier hora del día. No se requiere ningún equipo, así que son una adición perfecta sin importar el entrenamiento que tengas, ya sea que los agregues al final de una sesión de yoga o hagas una ronda de burpees después de correr.
1. Sentadilla: De pie, agáchate y pon las manos en el suelo delante de ti, justo fuera de los pies.
2. Plancha: Salta con ambos pies hacia atrás para que estés en posición de plancha.
3. Lagartija: Haz una flexión, tu pecho debería tocar el suelo. También puedes poner tus rodillas en el suelo aquí, lo que hace que la flexión sea más fácil.
4. Plancha: Vuelve a la posición de la plancha. Esto puede ser una flexión estricta, una flexión desde las rodillas, o con un salto directo.
5. Sentadilla: Lleva tus pies de nuevo hacia las manos.
6. Ponte de pie.
7 . Salta explosivamente: Lleva tus brazos por encima de tu cabeza.
Tanto como puedas, trata de entrar en un ritmo con tu respiración. Experimenta con lo que funciona para ti.
Reconoce que a medida que te alejes de la respiración, tu ritmo cambiará ligeramente. Pero siempre trata de mantener tu respiración lo más estable posible.