En los últimos tiempos se ha extendido un nuevo concepto de lo que es acogedor, lo ves en Instagram cada que lo abres. Ese lugar de comida vegana perfecto, el sofá lleno de cobijas y cojines en tonos ideales o ese café con figuritas en la espuma (¡con el frío sí se antoja!). La moda viene de países del norte de Europa como Dinamarca, Suecia o Noruega, que acuñaron el término “hygge”, una palabra que no tiene traducción literal en español pero tiene que ver con todo lo que te evoque comodidad y calidez.
Pero no tienes que viajar tan lejos para experimentar esta agradable sensación, que puedes aplicar en muchos aspectos de tu casa y tu día a día. Es posible replicar este concepto de “coziness” en tu hogar. Aquí algunos tips:
Invierte bien el tiempo libre
Ver series de Netflix enteras en 1 día, navegar en Instagram por horas… no hay nada malo con estas actividades. Pero si eres honesto, tampoco hay nada muy reconfortante o valioso en ellas. Mejor, haz que tus momentos de relajación cuenten. Sé consciente de las elecciones que haces en tus ratos libres. Por ejemplo, retomar ese libro que dejaste de leer en el verano, tomar un té mientras admiras el paisaje o ver un par de episodios de alguna serie que te interese mucho.
Toca madera
El diseño sueco se caracteriza por su minimalismo, pero no por ser frío. Para emular el estilo escandinavo puedes incluir un mueble o pieza decorativa de madera en tu espacio. Esto le dará un toque muy acogedor. Además, un reciente estudio concluyó que la presencia de este material en casa promueve la salud y el bienestar.
Trata la luz como un tesoro
Identifica las zonas de tu casa donde la luz ilumine mejor y elije tu pequeña esquina del relax. Aquí puedes leer, meditar o simplemente contemplar en las mejores horas de sol. Por la noche, intenta evitar la luz artificial excesiva. Siempre que puedas, utiliza velas o lámparas de luz suave. La iluminación es un factor clave cuando quieres un ambiente verdaderamente acogedor.
Rodéate de naturaleza
No necesitas vivir cerca de un bosque idílico. Hay muchas maneras de estar en contacto con la naturaleza. La más sencilla es tener plantas, especialmente si las combinas con los elementos de madera mencionados anteriormente. Eso sin contar con todas las ventajas de tener tu hogar naturalmente oxigenado.
Compra ropa cómoda bonita
El concepto “hygge” se trata de pasar tiempo de calidad en tu hogar. No necesitas una bata o unos pants para cada día de la semana. Pero si tu idea de ropa para estar en casa incluye demasiados agujeros como para usarla en la calle, debes reconsiderar. Tus outfits para disfrutar al máximo son cómodos y te hacen sonreír cuando te ves en el espejo.
Acurrúcate en serio
Este proceso también es sobre conectar con los que amas. No hay nada como un buen abrazo en el sofá para fortalecer la conexión que tienes con tu pareja, tu mascota o, ¿por qué no? tu almohada favorita. Lo más importante es disfrutar y estar presente cada minuto de este tiempo tan valioso.