Si eres adepto a los horóscopos, manifestaciones zodiacales e influencias de los astros y planetas, seguramente sabrás que existe un fenómeno llamado Mercurio retrógrado y que, según las convenciones de la astrología, es algo de bastante cuidado, ya que su influencia energética puede afectar las áreas que más apasionan a las personas y provocar más conflictos de lo habitual.

Ya que la energía de Mercurio se relaciona principalmente con la comunicación, se piensa que durante este evento hay que tener cuidado con lo que se habla, pues la palabras tienden a malinterpretarse.

¿Te has preguntado a qué se debe la “mala fama” de este fenómeno? Aquí hay una breve guía para entenderlo mejor, desde lo astrológico hasta lo astronómico.

Lo bueno, lo malo y lo real de Mercurio retrógrado

La “historia” de Mercurio retrógrado data desde mediados del siglo XVIII, cuando su fenómeno retrógrado fue observado por primera vez. De acuerdo con las creencias mitológicas, los granjeros lo usaban para sincronizar los horarios de la siembra y obtener mejores cosechas. Durante la expansión del espiritualismo, el interés por la astrología aumentó y fue cuando muchísimas más personas comenzaron a creer fervientemente en la influencia de los astros sobre las relaciones (y reacciones) humanas.

Aproximadamente en la década de los años 70, Mercurio retrógrado hizo su aparición en los horóscopos de las revistas y periódicos. Debido a que, según la mitología griega, Mercurio es el “mensajero de los dioses” y representa lo intelectual, la comunicación, el lenguaje oral y escrito, el comercio y la riqueza, el planeta se vinculó a esos asuntos. Se dice que cuando está retrógrado estas áreas se alteran y surgen contratiempos que, si bien no son catastróficos, son molestos y perturban el orden o la rutina cotidiana, por lo que es recomendable tomar precauciones.

Se supone que durante el tiempo que dura Mercurio retrógrado es usual que existan problemas que involucran la buena comunicación; por ejemplo, malentendidos entre las personas, discusiones sin salida, impulsividad, decisiones precipitadas e irritabilidad. Por eso, es importante no tomar decisiones apresuradas, hacer planes a largo plazo o comenzar proyectos que involucren algún riesgo. Se dice que la influencia de Mercurio incluso afecta a las telecomunicaciones y a los aparatos electrónicos, y podrías tener también problemas con el internet, los discos duros de las computadoras y las señales del celular.

Pero no todo es terrible, pues este período es fructífero para evaluarte íntimamente y mirar hacia atrás para poder hacer un cambio de dirección si es necesario. Te recuerda también que debes terminar los asuntos que traes entre manos, antes de comenzar nuevos. También, en este lapso te vuelves más intuitivo, receptivo y reflexivo. De esto se trata.

Astronómicamente, lo que pasa es esto: cuando el planeta más cercano al Sol es retrógrado, parece moverse “hacia atrás” (de este a oeste, en lugar de oeste a este) a través del cielo. Esta aparente inversión en la órbita de Mercurio es, en realidad, sólo una ilusión para las personas que lo ven desde la Tierra. De ahí lo “retrógrado”; pero esto es sólo un fenómeno de perspectiva. Cada cierto tiempo, los planetas parecen detener su movimiento e ir en retroceso, y a este fenómeno de percepción se le conoce técnicamente como retrogradación de los planetas.

Sin embargo, hay que aclarar que no existe todavía evidencia científica y concreta que asegure la influencia directa de Mercurio, al menos en la comunicación de persona a persona. Así que, aunque la energía de los astros pueda tener cienta influencia en la vida en la Tierra, la realidad es que tus relaciones, la forma en que se desarrollan y la buena o mala comunicación en ellas, dependen principalmente de ti mismo.