Probablemente has leído o escuchado acerca de cómo las hormonas regulan todo en tu cuerpo y cómo es realmente importante que siempre estén en estado óptimo. ¿Pero qué son exactamente las hormonas? Bueno, tu sistema endocrino está compuesto por series de glándulas que producen y secretan estas hormonas para diferentes funciones. 

Tus hormonas te ayudan a regular: 

•    El metabolismo y el apetito 
•    El latido de tu corazón 
•    Los ciclos de sueño 
•    Tu ciclo reproductivo y la función sexual
•    El crecimiento en general y el desarrollo 
•    Los niveles de estrés y el estado de ánimo
•    La temperatura corporal 

Con el mundo actual, lleno de toxicidad por todas partes (lo que comes, el estrés diario, lo que consumes en redes sociales, las noticias, etcétera), no es difícil encontrar la respuesta a por qué muchas mujeres pueden llegar a sufrir desequilibrios hormonales en algún punto de sus vidas. Asimismo, cosas como los anticonceptivos también pueden causarte problemas de este tipo. 

Síntomas de que tienes un desequilibrio hormonal

Como siempre, antes de buscar en internet la posible causa de por qué te sientes mal, tienes que consultarlo con un médico. Si tienes alguno de estos síntomas y crees que podrías tener un desequilibrio hormonal, ve con tu médico:

•    Pérdida o ganancia de peso sin saber por qué
•    Sudor excesivo sin explicación
•    Dificultad para dormir 
•    Piel seca o salpullido 
•    Cambios en tu ritmo cardíaco 
•    Cambios en tus niveles de azúcar
•    Irritabilidad o ansiedad
•    Fatiga 
•    Depresión
•    Dolores de cabeza 
•    Inflamación
•    Cambios en tu apetito 
•    Infertilidad 

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¿Cómo puede ayudarte el yoga a equilibrar tus hormonas? 

Es importante que tengas en cuenta que el yoga no es la solución a todos los males, si bien sí puede ser de gran ayuda. En muchas ocasiones es importante que además de practicar yoga, también asistas con un médico y sigas el tratamiento indicado. 

Dicho esto, practicar el tipo de yoga adecuado o las asanas indicadas para estos malestares, puede ser de gran ayuda. Básicamente, ello se debe a que las asanas se centran en diferentes glándulas. 

Asanas para equilibrar tus hormonas

Ustrasana (postura del camello) 

El camello es una de las mejores asanas para liberar toda la tensión alrededor de las glándulas tiroides y paratiroides. 

1. Desde una posición en rodillas a lo ancho de tu cadera, coloca tus manos sobre tu espalda baja. 

2. Inhala y abre tu pecho; lo importante es que tu garganta se abra. 

3, Puedes permanecer con tus manos sobre tu espalda baja o llevarlas hacia los talones, si tu cuerpo te lo permite (recuerda que debes escucharlo en todo momento). 

4. Presta mucha atención a tu cuello para que no te lastimes las cervicales. 

5. Puedes mantenerte así de tres a cinco respiraciones largas y profundas. 

Sasangasana (asana del conejo) 

Nutre el sistema nervioso y regula las hormonas. Trae sangre al cerebro; regula el tálamo y el hipotálamo.

1. Siéntate sobre tus talones. Exhala todo el aire mientras te agarras de tus talones.
 
2. Sin soltar tus talones, enconcha tu espalda y lleva la coronilla de tu cabeza hacia el tapete. 

3. Mantén por lo menos durante cinco respiraciones. 

Balasana (postura del niño) 

Esta postura es excelente para tu sistema endocrino, regula las hormonas y es benéfica para las personas con diabetes. Te ayuda a bajar los niveles de estrés y ansiedad, y también con los problemas para dormir. Asimismo, ayuda con la indigestión e incrementa el flujo de sangre al cerebro. 

1. Ve a cuatro puntos (rodillas alineadas con tus caderas y hombros con muñecas). 

2. Desde esta posición, lleva tus glúteos hacia tus talones. 

3. Puedes abrir tus rodillas a lo ancho de tu tapete o dejarlas cerradas. Eso depende de cómo te sientas más cómodo. 

4. Mantén esta posición durante cinco o 10 respiraciones. Entre más tiempo estés así, mejor te sentirás. 

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