Hay posturas muy emocionantes, que por el reto que implican y las zonas que activan se convierten en un momento climático de la práctica de yoga. Así es Ustrasana, también llamada la postura del camello, que hoy nos presenta nuestra yoguini Male Esparza.
En el video, que forma parte de una serie semanal que puedes ver completa en nuestro canal de YouTube, Harmonia.la, verás que Male marca varias opciones según el nivel del practicante. El camello es una asana que requiere fuerza y flexibilidad en la columna y mucha apertura de pecho y hombros, así como esfuerzo en las piernas y el abdomen.
Verás que si eres principiante, lo recomendable es empezar solamente con los puños en las lumbares, de forma que la pelvis se proyecte hacia delante al tiempo que el pecho se abre hacia arriba hasta formar un ligero arco en la espalda. Si esto se siente cómodo, puedes hacer Ardha Ustrasana o medio camello, que consiste en llevar un brazo hacia atrás hasta que la mano alcance el talón del mismo lado; si eliges esta opción, asegúrate de practicarla de ambos lados.
Si ya tienes una práctica más avanzada, experimenta la asana con ambas manos en los talones. Una variante que la facilita es dejar los metatarsos apoyados para que los talones estén más alcanzables; si quieres ir más profundo, apóyate sobre los empeines.
Es muy importante que durante la postura mantengas el ombligo hacia adentro, porque si no, todo el esfuerzo se recarga sobre las lumbares y puede lastimarlas. Un abdomen fuerte es la base para un camello saludable.
Definitivamente, Ustrasana requiere calentamiento previo. Al ser un arco profundo, nunca debes intentarlo directamente; antes realiza al menos unos cinco o siete saludos al Sol para que tu espalda y hombros se preparen, y permanece también varias respiraciones en cobra. Entra a la postura desde niño y descansa también ahí después de hacerla, para neutralizar la columna.
Está contraindicada para quienes tienen presión alta y lesiones en la espalda baja o cervicales, así como contractura de cuello. Es buena para mejorar la salud respiratoria, el dolor de espalda por cansancio, las molestias menstruales, la ansiedad y la fatiga. A nivel energético, trabaja profundamente con el cuarto chakra que está en el corazón y se relaciona con la empatía, la compasión y el amor.
Ahora, realiza la postura siguiendo este video: