El aloe vera es una planta muy popular y fácil de cultivar, ya que requiere pocos cuidados y sólo necesita agua aproximadamente cada semana. Además, es una planta muy versátil y con múltiples propiedades para la salud y el cuidado personal. Su uso se populariza sobre todo durante el verano, ya que es una gran aliada para ayudar a aliviar las molestias ocasionadas por la irritación ocasionada por la exposición prolongada al sol. 

El aloe vera es también uno de los ingredientes más populares cuando hablamos del cuidado de la piel sensible, gracias a sus propiedades calmantes y antinflamatorias.

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La piel sensible puede reaccionar a un sinfín de elementos, que van desde radicales libres hasta contacto directo con polvo, ropa y demás que pueden provocar una reacción desagradable e incómoda, por lo que el tener un cuidado especial de uso diario disminuye de forma importante estas molestias.

Los componentes del aloe vera hacen maravillas en la piel, ya que su gel contiene glicoproteínas y alantolina -que es la que se encarga de la regeneración epitelial- así como polisacáridos -que tienen una función antinflamatoria y relajante-. 

El aloe vera ayuda a mantener la piel tersa y saludable, incrementa su elasticidad y sus antioxidantes neutralizan los efectos dañinos de la exposición al sol. Con su uso puedes reducir los efectos del envejecimiento, como la aparición de manchas y arrugas.

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Para aprovechar estos beneficios es necesario colocar el gel de aloe vera directamente sobre la piel, dejarlo actuar entre 15 y 20 minutos y enjuagar con agua tibia. Lo mejor es hacerlo tres o cuatro veces por semana, de preferencia en la noche, pues la piel no debe exponerse al Sol mientras el gel actúa. 

Es importante que, antes de aplicar el aloe vera en la piel, pongas la penca a remojar en un poco de agua, con el fin de extraer la aloína, una sustancia que puede resultar irritante. Notarás que esta sustancia se está desprendiendo del gel porque el agua adquiere un color amarillento. Puedes dejarla remojando toda la noche, por la mañana cambiar el agua y dejarla unas horas más para poder usarla sin riesgos.

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Otra alternativa para aprovechar las propiedades del aloe vera para la piel es utilizar productos cosméticos que la contengan, como el gel de ducha de Sopharma pH5, un producto especialmente creado para las pieles sensibles, que combina los beneficios del aloe vera con otros activos como bisabolol, avena coloidal y D-Pantenol.

Este tipo de productos con formulaciones especiales pueden ayudar a aliviar la piel seca y con picazón asociada con el eczema, con la resequedad e incluso con afecciones más severas como la psoriasis, ya que actúan de forma suave y efectiva sobre la piel irritada o hipersensible. 

Cuando existe una condición cutánea, normalmente se debe a que la barrera protectora de la piel, también conocida como estrato córneo, está comprometida, por lo que llevar una rutina de cuidado inadecuada podría aumentar las molestias. 

Con una barrera rota, la piel es propensa a infecciones bacterianas y el uso de productos que contengan aloe vera en su formulación ayuda a prevenirlas, gracias a que esta planta tiene beneficios antisépticos que actúan contra hongos, bacterias y virus que podrían poner en riesgo la piel. Además, utilizar una crema líquida amable con la piel, ayuda a reducir la descamación, el enrojecimiento y la irritación causadas por este tipo de trastornos cutáneos.

Así que ya lo sabes, a la próxima que busques algún producto para el cuidado de la piel asegúrate de que contenga extracto de aloe vera o cultiva tu propia planta en casa para usar su gel directamente.