Yoga, según la definición de la Organización Mundial de la Salud, es:

el estado en el que se mantiene una armonía y equilibrio en la dieta alimentaria, actividad o ejercicio físico, vida sexual sana, conducción segura, manejo del estrés, capacidad intelectual, recreación (sobre todo al aire libre), descanso, higiene, paz espiritual, buenas relaciones interpersonales, así como también la relación con el entorno, entre otras.

Sin duda, el ejercicio físico es fundamental para lograr el mantenimiento de músculos, huesos y articulaciones saludables. El yoga forma parte de los ejercicios de bajo impacto que más favorecen la salud ósea, tiene múltiples beneficios y contribuye a llevar un estilo de vida saludable.

Así como para establecer una dieta correcta, en la práctica de yoga se busca la personalización. Como actividad física o ejercicio continuo, se puede individualizar el nivel de intensidad y el tipo de práctica a realizar. En las últimas dos décadas el yoga ha ganado mucha popularidad en todo el mundo y, entre otros, destacan sus beneficios a nivel articular.

Una articulación es el lugar en donde se encuentran o se unen dos huesos. En uno de los primeros estudios que han investigado la relación entre posibles lesiones articulares y la práctica de yoga, publicado en 2017, se concluyó que no existe una asociación negativa entre dicha práctica y la salud articular. Sin embargo, aún existe mucho camino científico que recorrer en torno a este tema.

Hay muchas posturas de yoga en las cuales se trabaja el equilibrio, el correcto soporte del propio peso, la elasticidad y la flexibilidad, con lo cual es posible desarrollar huesos sanos y músculos fuertes. De esta forma, las articulaciones también serán mucho más resistentes.

Con un sistema óseo funcional, el estrés y la tensión que provoca el dolor articular desaparecen. Algunas asanas pueden lograr que la articulación se fortalezca y con ello se incremente tanto la flexibilidad como el rango de movimiento, junto con la estabilidad.

Lo recomendable es siempre elegir un instructor certificado que te guíe y pueda sugerir aquellas posturas que vayan acorde a tu nivel. Aplica el concepto de mindfulness o “conciencia plena”: que tu pensamiento, tus emociones y acciones estén en el aquí y el ahora durante la práctica.

Con información de Herbalife Nutrition

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