Desde abril de 2007, en la Ciudad de México es legal que cualquier mujer pueda interrumpir su embarazo antes de las 12 semanas de gestación, sin importar el motivo de su decisión; desde entonces, ninguna otra entidad había realizado reformas similares, hasta ahora.
Este miércoles, Oaxaca acaba de convertirse en el segundo estado del país que decide despenalizar el aborto por cualquier causa, durante las primeras 12 semanas de embarazo.
Con 24 votos a favor y 10 en contra, el Congreso de la entidad aprobó el decreto que reforma el artículo 12 de la Constitución local, así como los artículos 312, 313, 315 y 316 de su Código Penal.
Las bancadas de Morena y Partido del Trabajo, así como las legisladoras independientes votaron a favor, mientras que los votos en contra fueron de los diputados del PRI, PAN y Encuentro Social.
Esta decisión, que constituye un avance en lo que a derechos reproductivos de la mujer se refiere, surgió gracias a la iniciativa presentada por la coordinadora del grupo parlamentario de Morena en el estado, Laura Estrada Mauro.
Entre los argumentos presentados por la legisladora para apoyar su iniciativa destaca que, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Salud de Oaxaca, cada año se practican al menos 2 mil 300 abortos clandestinos en la entidad.
Además, en su propuesta argumenta que penalizar el aborto no evita que las mujeres lo hagan ni contribuye a la disminución de la muerte materna, sino que sólo ocasiona que muchas de ellas recurran a otros medios que ponen en riesgo su vida, pues “una mujer que no quiere un embarazo lo va a interrumpir con ley, sin ley y a pesar de la ley”.
El documento también explica que con estas reformas no se propone el aborto como un método más de planificación, sino que busca que no se enjuicie moral ni penalmente a las mujeres si interrumpen su embarazo por libre determinación de su voluntad.