No importa cuál sea el momento difícil que estés enfrentando: una ruptura amorosa, una pérdida de empleo, un duelo o problemas familiares, no tiene nada de malo sentirse triste de vez en cuando. Incluso puede que ni siquiera tengas claro el motivo de tu tristeza y aun así es importante que te permitas sentirla. No debemos temerle a ninguna de nuestras emociones, ni intentar reprimirlas. Sin embargo, cuando sientes que la tristeza se ha apoderado de ti por mucho tiempo y quieres recuperar el control, se vale poner manos a la obra para combartirla.
Te dejamos cinco remedios infalibles para vencer la tristeza:
1. Ejercítate
El ejercicio libera endorfinas, hormonas encargadas del bienestar y la felicidad, por lo que una buena sesión de ejercicio es infalible para dejar de sentirte triste. Adopta una rutina de ejercicio regular y olvídate de la tristeza definitivamente. No necesita ser nada complicado ni muy pesado, ¿qué te parece bailar un rato?
2. Consume alimentos que tengan triptófano
El triptófano es un aminoácido esencial para la salud humana que se encuentra en alimentos como el chocolate, el pescado azul o las leguminosas (habas, lentejas, alubias, garbanzos). Consumirlo eleva los niveles de serotonina, por lo que ayuda a reducir el estrés, el insomnio y el malestar emocional.
3. Date un baño de sol
Por supuesto, no sin antes utilizar la protección solar adecuada. Está comprobado que los baños de sol mejoran el ánimo, debido a que estimulan la producción de hormonas como la endorfina y la serotonina. Además activan la circulación y el sistema inmune, por lo que terminarás lleno de energía y con la tristeza sacudida.
4. Abraza a un amigo(a)
Puede sonar un poco cursi, pero el contacto con otros seres humanos hace bien a nuestro cerebro. Abrazar a un amigo o un ser querido automáticamente nos reconforta y mejora nuestro estado de ánimo. ¿Quieres conocer más beneficios de los abrazos?
5. Haz una lista feliz
Escribe todas las cosas que te gustan de ti; añade los momentos más felices de tu vida y todo lo que disfrutas hacer. Ni siquiera tienes que hacerlo, con tan sólo recordarlo o pensar en ello cambiará tu ánimo, ¡inténtalo!