Lograr la realización personal es una carrera de resistencia, no de velocidad. El éxito se construye con base en acciones cotidianas, no golpes de suerte. Estos cinco hábitos, que puedes incorporar fácilmente a tu día a día, son una excelente manera de comenzar a sentar las bases para alcanzar todas las metas que te propongas.
1. Invierte cada día en tu desarrollo
Procura que no pase un día sin que aprendas o investigues algo nuevo, una palabra, una historia, una receta, no importa. La idea es que comiences a sentir que tu vida se llena de cosas útiles y valiosas. Te sorprenderá lo mucho que sabes de distintos temas después de unos meses.
2. Ten un plan para cada día
No dejes que los días pasen uno tras otro sin hacer nada. Lleva una agenda y planea qué quieres lograr diariamente. No importa si se trata solamente de mejoras domésticas o de las compras. La idea es que diariamente tengas un compromiso con el día que inicia. Un motivo para salir de la cama y actuar.
3. Conviértete en escucha de palo
Haz oídos completamente sordos a las opiniones negativas o a las críticas hacia tu persona que no construyen y sólo buscan hacerte daño. No te enganches en discusiones con personas tóxicas. Aprende a pasar de largo y a ignorar su mala energía.
4. Levántate si fallas
Aprende a sobrellevar el fracaso y volver a intentarlo cuantas veces sea necesario. No te dejes vencer por el desánimo ni caigas en autosabotajes. Recuerda que eres una persona valiosa y capaz y que tu mayor obstáculo a superar son tus propios prejuicios sobre ti mismo.
5. Practica la gratitud
La mayor receta para la felicidad no es tener muchas metas y ser perseverante para alcanzarlas sino saber ser agradecido por los logros que ya tienes. Da gracias todos los días por estar en donde estás y por el camino que has recorrido para llegar a este momento.