Un corazón roto, cuando se habla desde el ámbito sentimental, es algo que cualquier persona posiblemente ha sentido. Aunque muchas personas asocian un corazón roto con el final de una relación romántica, la terapeuta Jenna Palumbo hace énfasis en que este duelo va más allá de algo romántico, pues "todo duelo es complicado".
La muerte de un ser querido, la pérdida del trabajo, el cambio de carrera, la pérdida de un amigo cercano: todo esto puede dejarte con el corazón roto y hacerte sentir que tu mundo nunca volverá a ser el mismo.
No hay forma de evitarlo: sanar un corazón roto lleva tiempo. Pero hay cosas que puedes hacer para mantenerte cuerdo durante el proceso de curación y proteger tu bienestar emocional.
El dolor no es el mismo para todos y lo mejor que puedes hacer por ti mismo es darte permiso para sentir toda tu tristeza, enojo, soledad o culpa.
"A veces, al hacer eso, inconscientemente les das permiso a quienes te rodean para que también sientan su propio dolor, y ya no sentirás que eres el único que la pasa mal", dice Palumbo. Es posible que descubras que un amigo ha pasado por un dolor similar y tiene algunos consejos para ti.
Cuando estás angustiado, es fácil olvidarte de tus necesidades personales. Pero el duelo no es sólo una experiencia emocional, también te agota físicamente. De hecho, diversas investigaciones han demostrado que el dolor físico y emocional viaja por las mismas vías en el cerebro.
La respiración profunda, la meditación y el ejercicio, pueden ser excelentes formas de conservar la energía. Pero tampoco te castigues por eso. Simplemente hacer un esfuerzo por comer y mantenerte hidratado puede ser de gran ayuda. Tómatelo con calma, un día a la vez.
"Todos lidian con la pérdida a su manera", dice Kristen Carpenter, psicóloga del Departamento de Psiquiatría y Medicina del Comportamiento del Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio.
Ella aconseja tener claro si prefieres llorar en privado, con el apoyo de amigos cercanos o con un amplio círculo de personas accesibles a través de las redes sociales. Dar a conocer tus necesidades permitirá que alguien que quiera brindar su apoyo te ayude y te facilite la vida en esos momentos.
Cómo funciona:
En varias investigaciones se ha descubierto que pasar tan sólo 2 horas a la semana al aire libre puede mejorar tu salud mental y física. Si puedes salir a un hermoso paisaje, genial; pero incluso los paseos regulares por el vecindario pueden ayudarte.
Saber que otras personas han pasado por experiencias similares y han salido de ello puede ayudarte a sentirte menos solo. Leer un libro o escuchar un podcast también puede ayudar y ser una forma de apoyo para que proceses tus emociones.
Reserva tiempo todos los días para hacer algo que se sienta positivo, ya sea escribir un diario, reunirte con un amigo cercano o ver un programa que te haga reír. Ahora con la pandemia puedes intentar hacer videollamadas con tus amigos, así distraes tu mente con una buena conversación y logras expresar tus sentimientos.
"No desperdicies energía en sentirte avergonzado o culpable por tus sentimientos", dice Carpenter. En lugar de eso, "invierte esa energía en hacer esfuerzos concretos para sentirte mejor y sanar".
Date de 10 a 15 minutos cada día para reconocer y sentir st tristeza. Si le pones atención, es posible que descubras que aparece cada vez menos a lo largo del día.
La autocompasión implica tratarte a ti mismo con amor y respeto sin juzgarte. El duelo no es igual para todos y no tiene un calendario. Evita declaraciones como "debería salir adelante a estas alturas" y, mejor, dedica todo el tiempo que sea necesario para sanar.
Piensa en cómo tratarías a un amigo cercano o familiar que pasa por un momento difícil: ¿Qué le dirías? ¿Qué le ofrecerías? ¿Cómo le demostrarías que te importa? Toma tus respuestas y aplícalas a ti mismo.
Una pérdida profunda, como la muerte de un ser querido, se verá muy diferente a un rechazo en el trabajo, señala la terapeuta Victoria Fisher. "En ambos casos, es imperativo permitirte sentir lo que sientes y recordar que está bien no estar bien".
Incluso si haces todo lo posible para superar tu angustia, probablemente todavía tendrás días malos. Tómalos como vienen y vuelve a intentarlo mañana.
Es importante hablar de tus sentimientos con los demás y es totalmente normal necesitar ayuda adicional. Si descubres que tu dolor es demasiado como para soportarlo por tu cuenta, un profesional de la salud mental puede ayudarte a superar las emociones dolorosas. Incluso dos o tres sesiones pueden ayudarte a desarrollar nuevas herramientas de autocuidado y aceptación.
Con información de Healthline
Fotografía de portada: Pexels