Desde la infancia los hombres aprendemos a esconder aquellas emociones que consideramos un signo de debilidad, ya que uno de los atributos culturalmente relacionados con la hombría es la fortaleza, de tal manera que aunque nos sintamos desesperanzados o agobiados lo negamos o intentamos ocultarlo. Sin embargo, la depresión es un problema común que todos podemos experimentar en algún momento de nuestras vidas, y que no sólo merma nuestra calidad de vida sino que también tiene un efecto negativo en la vida de nuestra familia y seres queridos. Para muchos de nosotros es difícil hablar de nuestros sentimientos, por lo cual nos enfocamos en encontrar paliativos para los síntomas físicos de la depresión. Por esta razón los hombres que sufren depresión tienen cuatro veces más probabilidades de cometer suicidio que las mujeres, así que es importante buscar ayuda para la depresión antes de que esto suceda. 

Algunos de los síntomas de depresión en los hombres son los siguientes:

1. Dolor físico

Cuando los sentimientos no pueden expresarse, el cuerpo grita. Algunos síntomas físicos incluyen dolor de espalda, jaquecas frecuentes, problemas para dormir, trastornos digestivos y disfunción eréctil que no responden al tratamiento convencional. 

2. Ira

Esto puede ir desde irritabilidad o sensibilidad excesiva frente a las críticas hasta pérdida del sentido del humor, ataques de ira o conductas abusivas, controladoras y violentas. 

3. Conducta imprudente

Un hombre que padece depresión puede buscar escapar de sus sentimientos a través de deportes de alto riesgo, sexo sin protección u otras conductas riesgosas, las cuales también incluyen beber en exceso, abuso de drogas o problemas con apuestas. 

Es importante mencionar que la depresión afecta a millones de hombres de todas las edades, clases sociales y ocupaciones alrededor del mundo, de tal manera que no importa si aparentemente no tienes nada de lo cual quejarte, puedes estar deprimido. De hecho, la depresión no necesariamente está relacionada con una carencia material en el mundo exterior; muchas veces tiene que ver con situaciones no resueltas en nuestro interior. Si respondes afirmativamente a varias de las siguientes aseveraciones, es posible que estés deprimido:

• Me siento desesperanzado e impotente.
• He perdido interés en mis amistades, actividades y pasatiempos que solía disfrutar.
• Me siento mucho más irritable y agresivo de lo usual. 
• He aumentado mi consumo de alcohol, drogas o me automedico. 
• Me siento inquieto y ansioso. 
• No puedo dormir o duermo en exceso.
• No tengo hambre o tengo demasiada hambre. 
• Tengo problemas para concentrarme y mi productividad se ha visto afectada.
• No puedo controlar mis pensamientos negativos. 

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En caso de que te des cuenta de que estás deprimido, lo primero que debes hacer es no caer en la desesperación. Hay varias cosas que puedes hacer:

1. Habla con sinceridad con algún miembro de tu familia o un amigo. Recuerda que buscar apoyo es un signo de inteligencia emocional, no de debilidad. 

2. Participa en algunas actividades sociales, aunque a veces no te sientas con muchas ganas. 

3. Establece una rutina de ejercicio. Si no te sientes con ánimos, adopta un perro y sal a caminar con él todos los días. 

4. Únete a un grupo de apoyo para la depresión. 

5. Ofrécete como voluntario; ayudar a otros te dará satisfacción y un propósito en la vida. 

6. Busca ayuda profesional.

7. Aprende a meditar.

Con información de Medicine Net