La decisión de ir a terapia no es cualquier cosa. Entre otras cosas, es necesario tener ganas de superar situaciones y valor para ponerte en una posición totalmente vulnerable. Algunas veces, trabajar en ti mismo es de los retos más difíciles que puedes hacer.

Una vez que has tomado la decisión, te das cuenta de que existen muchas variantes en el mundo de la psicología. ¿Cómo elegir la mejor opción para ti? Aquí algunas características de seis de las modalidades de terapias más socorridas:

• Terapia de conducta dialéctica. Se basa en aprender cuatro pilares: efectividad interpersonal, regulación emocional, mindfulness y tolerancia al estrés. Llevarás control en un diario donde describirás lo que pasa cada día. Durante la sesión, repasarás tus notas con el terapeuta. Es especialmente útil para tratar la depresión, la ansiedad y trastornos como la anorexia y la bulimia.

• Terapia de comportamiento cognitivo. Trabaja sobre los problemas al modificar los pensamientos, las emociones y las conductas disfuncionales. Se enfoca en distorsiones cognitivas y habilidades de adaptación. Funciona muy bien en casos de desorden obsesivo-compulsivo, desórdenes alimenticios, fobias y dificultades en las relaciones.

• Psicoterapia interpersonal. Utiliza la relación entre el terapeuta y el paciente como vehículo principal para el cambio. La terapia se convierte en un laboratorio donde se experimenta con nuevas formas de interacción con otras personas. Es ideal para quien busca entender mejor las relaciones que establece con los otros.

• Terapia cognitiva basada en mindfulness. Construye sobre los principios de la terapia cognitiva tradicional y agrega el uso de técnicas como la meditación de atención plena. Aquí aprenderás a poner atención consciente a tus pensamientos y emociones sin apegarte ni juzgar. Puede resultar muy benéfica para los casos de depresión grave.

• Terapia de aceptación y compromiso. Ayuda a identificar tus valores y te enseña estrategias para liberarte de pensamientos que obstaculizan tu camino para estar presente en tu propia vida con un propósito. Esta dinámica es positiva para cualquiera.

• Terapia en pareja. Genera un espacio donde puedes traer más de ti mismo a tu relación, en un ambiente seguro. Funciona mucho mejor cuando compartes más de tu yo auténtico con tu compañero, y viceversa. Es sana para todas las parejas, pero en especial si pretenden superar algún engaño o traición.

Si aún estás indeciso y te gustaría saber más sobre las variantes de terapia a las que puedes recurrir, visita la página web de Psychology Today y encontrarás una lista larga de opciones. También puedes consultar el Centro de Psicoterapias México. Para que la terapia verdaderamente funcione, es fundamental que te sientas cómodo con la modalidad que elijas.

Con información de Girlboss