El verano ya casi está aquí y pronto verás que todas las revistas y sitios de internet se llenan de recomendaciones para lucir fabulosa en bikini: dietas milagrosas, rutinas de ejercicio, trucos y licuados desinflamantes, todo lo que necesitas para sentirte mínimamente cómoda en la playa o en la alberca.
También te puede interesar: 5 señales de que tienes que trabajar en tu autoestima
Esta es la temporada en que todos esos complejos que ocultamos bajo capas y capas de suéteres el resto del año salen a relucir. Por lo tanto, por qué no convertirla en un buen momento para preguntarnos quién los puso ahí, por qué creemos lo que creemos respecto de nuestro cuerpo. ¿Son esas ideas realmente nuestras o las aprendimos? ¿Dónde?
¿A quién beneficia tu inseguridad?
¿Te has preguntado qué pasaría si un día todas las mujeres se levantaran amando su cuerpo? ¿Qué cambiaría? Bueno, primero que nada, el consumo: adiós maquillajes aclarantes, cremas tonificantes y antiarrugas, tintes, ceras depiladoras y brasieres con push up. Todas esas industrias se volverían obsoletas... así que no, tu inseguridad no es gratuita, hay mucha gente haciéndose muy rica con ella.
Cada vez que te miras al espejo y lo único que ves son defectos, cada vez que permites que otros determinen qué talla deberías usar para sentirte bien o cuánto deberías pesar para quererte, hay una industria beneficiándose de eso, ¿lo habías pensado?
Todas las personas queremos encajar, ser amadas y valoradas pero, antes de juzgarte o de criticar tu cuerpo, recuerda que es tu inseguridad y no tu apariencia tu principal freno para lograr lo que deseas.
Haz la prueba este verano; intenta seguir estos tips y observa cómo te sientes después:
También lee: 7 tips para fortalecer tu autoestima en momentos difíciles