El mundo actual está lleno de caos por donde lo veas. Pero ponte a pensar un poco, ¿cuándo no ha sido así? Las guerras siempre han existido, las enfermedades también; lo que pasa es que ahora, con las redes sociales y la hiperconectividad, te enteras de todo mucho más rápido que antes. E incluso hay muchas noticias falsas en torno a las crisis que ocurren alrededor del mundo. Lo que sí es cierto es que no todo siempre puede ser caos y debe existir un equilibrio. Todo pasa. 

Por ejemplo, de acuerdo con los hindúes, actualmente el mundo se encuentra en el kaliyuga, un momento de caos y cambios. Kali es la diosa de la destrucción y el cambio. Entonces, en teoría, el mundo va a pasar por muchos cambios durante este tiempo. Así ha sido siempre; son ciclos, se cierran, se abren, se terminan. Lo que tú tienes que hacer es mantener la calma y no pensar que todo ya está perdido. Piensa en cómo puedes ayudar a los demás y qué puedes hacer en tu vida para que no todo sea caótico.

Se trata de encontrar un equilibrio. No puedes decir que todo lo que pasa es irreal y hacerlo a un lado, no debes tomar las cosas a la ligera, pero tampoco tu mundo debe girar en torno a todo lo malo. Piensa en todas esas cosas que te hacen sonreír día con día y todo lo que Dios, el universo o quién tú quieras, te ha dado para tener comida, techo, amigos, salud, una vida plena.

1. No reacciones de forma instintiva

Esto es algo natural, el modo “huida o lucha” en el que tu cuerpo se pone cuanto detecta algún tipo de amenaza. Pero actuar así no te dejará pensar con claridad. Antes de sacar cualquier tipo de conclusión, toma un respiro, investiga, recolecta toda la información que puedas (de diferentes fuentes), y después decide cómo quieres actuar.

2. Mantente positivo

Sí, es algo difícil de lograr si te encuentras en una situación complicada y de estrés. Al mantenerte positivo podrás ver las cosas desde otra perspectiva y no todo será una tormenta sin fin. ¿Cuántas veces has pensado lo peor y al final resulta mucho menos grave de lo que pensaste?

3. Cuida tu salud física y mental

Si tu mente y cuerpo funcionan de forma óptima, podrás reaccionar ante las situaciones difíciles de mejor manera. Aliméntate bien, toma vitaminas y suplementos, haz actividad física, medita y haz ejercicios de respiración que ayuden a tu cuerpo.

4. Sé parte de una comunidad

Necesitas siempre tener una red de apoyo. En momentos de crisis, contar con tus amigos más cercanos o familiares puede ser tu mejor herramienta para recordar todo lo bueno que tienes en la vida y que vale la pena sonreír.

5. Desarrolla una herramienta para afrontar los problemas

Desarrolla un ritual que te guste; puede ser meditar por la mañana, hacer caminatas regulares o inscribirte a clases de yoga o algún ejercicio aeróbico. Recuerda que los descansos cortos de ejercicio pueden aumentar la resistencia. Estas técnicas pueden ayudarte a sentirte más capacitado para manejar las situaciones difíciles.