Hoy en día es sumamente extraño que alguien no tenga redes sociales. Si eres de esas personas, entonces puntos para ti. Y si no, bueno, ante todo tienes que aprender a saber cómo manejar tu tiempo en ellas de una manera que no afecte tu vida. Se ha hablado mucho de cómo, en un mundo tan hiper conectado, la gente cada vez se siente más sola, existen más casos de ansiedad, depresión y diversos trastornos mentales.
Como alguien que cerró sus redes sociales hace ya unos meses, puedo decir realmente que ha sido una gran decisión. Es mucho mejor pasar tiempo de calidad con las personas en la vida real; te puedo asegurar que no conoces a un gran porcentaje de tus contactos en redes. Si muchas personas consideran necesario darse un respiro de las redes sociales, es posible que sea porque algo en verdad está mal. Tal vez no sea culpa de las redes en sí, sino del uso que se les da.
Las redes se han convertido en una gran parte de tu vida, tanto que dejarlas puede compararse a dejar un hábito realmente malo. Tu cerebro ya está acostumbrado a revisar tus notificaciones cada minuto y recibir ese hit de dopamina. ¿Sabías que eso hacen las notificaciones? Funcionan como gratificación instantánea y por eso te vuelves adicto.
Toma un minuto, realmente piensa y sé honesto con la siguiente pregunta: ¿cuántas veces al día revisas tus redes sociales? Esto también te ayudará a crear límites sanos entre tu vida laboral y personal.
De acuerdo con Elizabeth Su, una asesora de vida experta en mindfulness y profesora de yoga certificada, minimizar el tiempo que pasas pegado a tu teléfono puede hacer que tu creatividad mejore.
Tu creatividad chispea, porque tu imaginación puede correr libre cuando no te desplazas sin sentido por las redes sociales y todo lo que haces en tu teléfono.
De acuerdo con diferentes estudios, el uso excesivo de las redes sociales podría tener relación con los niveles de ansiedad vividos por la población hoy en día. Por supuesto que no son los únicos culpables, pero sí tienen mucha influencia en tu vida y cómo te sientes.
El profesor en psicología Jacob Barkley, dice que dejar las redes sociales podría ayudarte a recuperar tu paz mental. Esto en parte es porque muchas personas ven la comunicación constante como algo que los estresa: el contestar mensajes todo el tiempo, los correos o las notificaciones, en general todo este bombardeo se vuelve abrumador.
Resulta curioso cómo algo que se supone está ahí para conectarte con más personas, en realidad te aleja más de ellas. De acuerdo con Andreas Kaplan, especialista en redes sociales, el uso excesivo de Facebook podría resultar en temas de aislamiento social, depresión y sentimientos de tristeza. El punto es que puedas equilibrar tu vida real con las redes sociales; esa es la clave de todo.
Ahora que ya leíste un poco sobre algunos beneficios que obtendrás si dejas las redes, puedes decidir dar el siguiente paso. Tal vez lo hagas por un tiempo solamente, pero lo importante es que lo intentes y veas cómo te sientes.
La adicción a las redes sociales es algo real. En muchas ocasiones puede ser que estés en una reunión, con tus amigos, en el trabajo; cualquiera que sea la situación, pero estás más al pendiente de tus redes que de lo que pasa en ese momento a tu alrededor.
Comienza por prestar atención en lo que haces en cada momento. Si vas a desayunar, hazlo bien, mantente presente. Con todo lo que hagas en el día, siempre mantén un estado de atención plena.
Tu cerebro realmente ya se acostumbró a las notificaciones, los comentarios, la gratificación instantánea, tal cual pasa con una droga. Los primeros días serán complicados, busca algo más que hacer, ponte a leer un libro, adopta un nuevo hobby, lo que se te ocurra para que dejes de pensar en reactivar tus cuentas.
Si te encuentras a punto de regresar a las redes, entonces recuerda por qué lo hiciste desde el principio. Las cosas toman tiempo, así que necesitas tener paciencia para que puedas ver los resultados.
Al final del día, no puedes echarle la culpa a las redes sociales por cómo te hacen sentir. Recuerda lo que decían los estoicos: no puedes controlar lo que ocurre, pero sí cómo reaccionas a la situación. Si después de un tiempo quieres regresar, entonces debes aprender a elegir bien el ocntenido que consumes y a controlar tu tiempo en línea. Al final esto te puede enseñar mucho de ti.
Con información de Self y Elite Daily