Los superfoods o superalimentos son los alimentos naturales (frutas, verduras, cereales y semillas) que son especialmente ricos en nutrientes que benefician la salud, como vitaminas, minerales, antioxidantes y ácidos grasos, entre otros. 

 

Muchos de estos nutrientes son muy valorados por sus efectos nutritivos y medicinales, y los siguientes alimentos contienen aquellos que en especial ayudan a mejorar tu estado de ánimo y te hacen sentir con más energía.

 

Cacao 

El cacao en polvo es un subproducto de la semilla seca y fermentada del fruto del árbol del cacao. Es lo que le da al chocolate su sabor distintivo, aunque el cacao en sí no es naturalmente dulce.

 

El cacao es rico en minerales, flavonoides y otros antioxidantes que promueven la salud, y el cacao en polvo tiene un alto contenido de fibra insoluble, la cual mejora la digestión y ayuda a reducir el riesgo de diabetes. Además, ayuda a proteger el cerebro de los efectos del envejecimiento, protege los nervios de la inflamación y las lesiones y contribuye a reducir la presión arterial y el riesgo de enfermedades cardiacas.

 

Uno de los usos medicinales más comunes del cacao ha sido la estimulación del sistema nervioso para sentirse con más energía, gracias a la teobromina que tiene un efecto estimulante más suave que el de la cafeína. 

 

El cacao también contiene triptófano, un aminoácido esencial asociado con el bienestar emocional y el alivio de la ansiedad. Y cuenta con anandamida (también conocida como la "molécula de la felicidad"), una grasa que se une a los receptores de cannabinoides en el cerebro para promover una sensación placentera.

 

Puedes consumir cacao en el chocolate oscuro, amargo o semiamargo (los chocolates de leche no se recomiendan, ya que tienen un alto contenido de azúcar y muy poco cacao). O bien, puedes comprarlo en polvo y agregarlo a tus licuados, postres y smoothies, por supuesto, sin agregar azúcar (puedes optar por un endulzante natural como el monk fruit).

 

Polvo de maca

La raíz de la maca es parecida a un rábano. Generalmente se deja secar y se muele hasta convertirla en un polvo que tiene un sabor a caramelo. Este superalimento es una proteína completa y rica en calcio, magnesio, potasio y vitamina C, entre otras vitaminas y minerales esenciales. Proporciona un impulso de energía pero no es un estimulante (como la cafeína), por lo que no te dejará nervioso ni ansioso. 

 

La maca es un adaptógeno, lo que significa que se adapta a las necesidades del cuerpo y tiene un efecto equilibrante. Como resultado, ayuda a mantener el balance, equilibra los niveles de estrés, contribuye al equilibrio hormonal y reduce los síntomas del síndrome premenstrual. 

 

Puedes agregar polvo de maca a tus licuados y smoothies, al cereal, el yogurt, a una taza de leche caliente o incluso a tu café. Si nunca has tomado maca, lo mejor es iniciar con media cucharadita cada tercer día y aumentar gradualmente hasta llegar a una cucharada al día. Se recomienda tomarla por la mañana y evitarla en la noche, debido a la energía que proporciona.

 

Coco

Esta fruta es reconocida por su agua refrescante y su pulpa rica en grasas saludables. El agua de los cocos verdes jóvenes tiene un alto contenido de potasio y otros electrolitos que ayudan al cuerpo a rehidratarse al hacer ejercicio (es una opción natural y saludable, en lugar de las bebidas deportivas). 

 

La pulpa de coco es rica en fibra insoluble, que ayuda a mover los alimentos a través del sistema digestivo para mantener su regularidad. La pulpa también proporciona minerales como manganeso y potasio. La leche de coco, la crema, el aceite y la mantequilla se elaboran con la pulpa.

 

Además, es rico en grasas saturadas con triglicéridos de cadena media, que ayudan a acelerar el metabolismo y propician la pérdida de grasa corporal; pero eso no es todo, pues si lo consumes por la mañana te ayudará a que tu cerebro esté más despierto y ágil para rendir mejor durante el día. 

 

Una de las formas más fáciles de aumentar la ingesta de coco es agregarlo rayado a tu mezcla de avena o granola, incluirlo en licuados y smoothies. También puedes cambiar la leche habitual por la de coco, usar el aceite para cocinar y untar la mantequilla en tu pan tostado. Por otra parte, nada mejor que beber su agua para mantenerte saludable y muy bien hidratado.

 

Espirulina

La espirulina un tipo de bacteria que crece en los lagos de agua salada y algunos de agua dulce. Es muy rica en nutrientes. Contiene minerales (especialmente hierro), vitaminas, antioxidantes y ácido gamma-linoleico, un ácido graso beneficioso. Es una excelente fuente de vitamina B12 para vegetarianos y veganos; además, se considera una proteína completa y muy fácil de digerir. 

 

El antioxidante C-ficocianina le da su color único y al consumirlo ayuda a eliminar los radicales libres para evitar que dañen las células y el ADN del cuerpo. Esto contribuye a reducir el riesgo de enfermedades crónicas.

 

Además, sus propiedades ayudan a reducir el daño muscular y el estrés oxidativo que provocan actividades que implican un esfurzo o desgaste físico, como el ejercicio, de modo que su consumo favorece la recuperación tras el esfuerzo.

 

La espirulina se puede consumir en forma de tabletas o cápsulas, mientras que el polvo se puede agregar a jugos, licuados y smoothies. Las frutas dulces como los plátanos funcionan mejor para contrarrestar el sabor, si no es de tu agrado. Además, la puedes agregar a tus ensaladas.

 

Bayas de goji

Estas bayas agridulces han sido parte de la medicina tradicional china desde hace mucho tiempo. Son ricas en vitaminas, oligoelementos, polisacáridos y antioxidantes, incluidos los carotenoides, que son los responsables de su distintivo color rojo anaranjado y muchos de sus beneficios para la salud. También son una fuente de carbohidratos para obtener energía y aminoácidos para ayudar a satisfacer las necesidades de proteínas del cuerpo. 

 

En cuanto al efecto de este superalimento en el estado de ánimo, un estudio reciente demostró que el extracto de baya de goji puede ayudar a aliviar la ansiedad de bajo nivel.

 

Puedes preparar un delicioso jugo al mezclar las bayas con agua de coco, o bien, puedes agregar bayas de goji a tu mezcla de frutos secos, avena, cereal o ensalada, así como a tus smoothies y licuados. 

 

Semillas de chía

Las semillas de chía son ricas en fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes, incluidos los ácidos grasos omega 3, asociados con la prevención de enfermedades cardiacas. Además, pueden ayudar a mantener el equilibrio de la glucosa en la sangre y de la presión arterial, así como a reducir y prevenir la inflamación.  

 

Compuestas por un 20% de proteína, las semillas de chía se consideran una proteína completa porque entregan los nueve aminoácidos esenciales que el cuerpo no puede producir. Y hay más buenas noticias: su alto contenido de fibra puede ayudar a que te sientas satisfecho por más tiempo, lo cual evita el hambre entre comidas y ayuda a bajar o mantener el peso.

 

Debido a su alto contenido de nutrientes, como proteína y carbohidratos de absorición lenta, las semillas de chía son óptimas para ayudarte a elevar tu energía, tanto para realizar tus actividades diarias como para terminar tus rutinas en el gimnasio.

 

Puedes agregar semillas de chía a batidos, cereales y jugos para aumentar la fibra y los nutrientes. Estas semillas absorben aproximadamente 10 veces su peso en agua y desarrollan una textura gelatinosa cuando se remojan, lo cual las convierte en un sustituto ideal para el huevo en las dietas veganas, y también las puedes usar como espesante en diversas recetas, aderezos o salsas. 

 

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